Winnie es una peludita que cayó a una quebrada de aguas negras del río Agres en Escazú, luego de escapar de su casa.
La perrita estuvo desaparecida dos días y podrá seguir moviendo su colita, gracias a que fue rescatada por los Bomberos de Pavas.
Winnie pudo regresar junto a su familia gracias a que andaba un collar con el número de teléfono de su dueña, quien estaba desesperada por recuperarla.
Esta historia comenzó el lunes 16 de agosto, cuando la peludita se escapó de la casa al aprovechar que el portón de la cochera se estaba cerrando.
Al día siguiente un jardinero la vio debajo de un puente en Los Laureles de Escazú y dio la alerta al 9-1-1, ya que para él era muy complicado rescatarla.
El sargento de bomberos Michael Marín, de la estación de Pavas, atendió la situación junto con sus compañeros. Ellos vieron que la peludita había caído a un guindo de aproximadamente 15 metros de profundidad.
Marín bajó hasta donde estaba Winnie y se sorprendió que no tuviera fracturas, pero sí estaba con hipotermia y algunos rasguños. Al ver su collar de inmediato les dijo a sus compañeros que alertaran a los dueños, quienes llegaron en menos de 10 minutos y vieron todo el rescate.
Tanto la perrita como sus dueños y el bombero tuvieron que hacer una desinfección inmediata porque se les olvidó de dónde la habían sacado y abrazaron a Winnie. La alegría era demasiada porque los dueños le dijeron al bombero que este martes 17 de agosto la cachorra cumplía un año y se les partía el corazón no tenerla a su lado.
En agradecimiento, la familia de la perrita les llevó a los bomberos de Pavas un queque y repostería.
“No hacía falta que nos llevaran un pastel, es parte de nuestra labor atender estas situaciones, pero lo agradecemos porque estaba riquísimo. Les pedimos a las familias estar alertas de sus mascotas y les recordamos la importancia de que anden placas porque eso permite devolverlas con sus familias, de lo contrario la hubiésemos tenido que llevar a un refugio”, dijo Marín.