EscucharEl debut del Machillo Ramírez se saldó con un empate llenó de actitud por parte de los manudos, pero Saprissa impuso maña y respeto y sacó un punto del Morera Soto, anoche, en el clásico nacional.
El empate no es bueno para ninguno pues el objetivo de ambos se aleja un poco más, la Liga del liderato, incluso del segundo puesto y Saprissa del cuarto. La “S” recibirá a Cartaginés con la obligación de ganar.
El foco de atención, la mirada de los aficionados, del país, estaban posados en la Liga del Macho Ramírez. Luego de siete años sin dirigir, su llegada al banquillo se vendió como el regreso del hijo pródigo, el Mesías, el “último cartucho”, dicen los “no liguistas”.
Y se vio otra actitud, los Leones corrieron, se mataron en la cancha y tuvieron un rival digno para medir al Macho, a esa nueva Liga, aunque queda la duda si fue por la motivación, por ese vieja adagio que dice, que en el fútbol, “toda escoba nueva barre mejor”.
El primer tiempo fue intenso. El León mostró esa nueva cara. Saprissa le regaló el confite en esos primeros minutos pero apretó cuando recibió el gol manudo.
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A todo tren. La Liga inició como una locomotora aunque el gol de apertura llegó hasta el 19, luego de un dominio total, pero sin grandes llegadas.
En esa del gol, la Liga inició la jugada desde propio campo, por la izquierda, fueron avanzando por el medio campo, a la derecha, hasta que la bola llegó a Celso Borges, este abrió con Alejandro Bran y el volante tiró un centro incómodo, a media altura, fuerte, al punto de penal y Diego Campos, de barrida, la mandó a guardar.
Lo bueno de Saprissa, es que es Saprissa y esa euforia manuda la desinfló rapidito, antes que fuera tarde.
Seis minutos después. El Monstruo mostró que también pueden llevar la bola de un extremo a otro, quizás con fútbol más largo, pero igual de efectivo. Joseph Mora envió un centro pasado, de izquierda a derecha. Gerson Torres ganó la bola y la tiró al punto de penal, donde Ariel Rodríguez la empalmó y la mandó al fondo de la red para empatar el juego.
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Después, la Liga volvió a tomar el control del juego, Rónald Matarrita, en su mejor juego desde que volvió a la Liga, recuperó un balón y le quedó a Diego Campos, quien sacó una marca y remató, no muy potente pero si con curva y de piconazo. Alvarado no se la jugó y mandó al córner, al 29.
Dos minutos después, la Liga volvió a llegar, otra vez con Matarrita, quien sacó un centro que le llegó a Borges, quien cerraba por la derecha y le dio de seguido, pero el portero Alvarado, volvió a evitar la caída de su marco.
Saprissa fue mejor al inicio del complemento, pues tuvo dos ocasiones que le pararon el corazón al Morera Soto, primero con un remate raso de Gerson Torres, que el guardameta Washington Ortega desvió al córner, al 47.
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Y dos minutos después, con un frentazo del Samurái que apenas salió desviado, luego de un córner de Mariano.
Intenso. Pero luego, el partido volvió a la dinámica del primer tiempo, una Liga intensa, que circula la bola, que busca el centro, que ensaya remates lejanos, el mejor, uno de Canhoto, al 64, que pasó rozando el ángulo de Alvarado.
Villalobos y Matarrita se juntaron en el 75 y el lateral mandó un centro claro a Joel Campbell, quien entró de cabeza y la tiró alta, frente al marco, una opción clara.
Una de las más claras la tuvo el español Alberto Toril, a quien le quedó un rechazo de frente y en área pero le dio con todo, por fuera.
El empate no le hacía bien a ninguno, pero numéricamente, era más malo para Saprissa, pues quedaba dos puntos abajo del Cartaginés, en esa lucha por el cuarto lugar.
En cambio, viendo la tabla, la Liga se asentaba de tercero, sin poder llegar al segundo y viendo más lejos al Team en la cima, pero cada vez más cerca de la clasificación. El entusiasmo de la gente, las ganas de ganar un clásico y en el regreso del Macho, eso es otra cosa.
