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La situación del COVID-19 tiene en jaque a diversos sectores del deporte y uno de ellos es el fútbol aficionado, cuya posibilidad de volver a las canchas aún se ve lejana, según el ministro de Deportes, Hernán Solano.
Ante las declaraciones del jerarca, tanto jugadores como árbitros de la liga aficionada levantaron la voz para encontrar soluciones y poder regresar pronto y no a fin de año, como lo sugirió el Ministerio (de Salud).
En un comunicado de prensa, los silbateros de la Liga Oficial de Asociaciones de Árbitros de Fútbol Aficionado (LOAAF) explicaron mediante tres puntos la necesidad que están pasando por el parón.
"La mayoría de nuestros asociados y asociadas dependen exclusivamente de los ingresos que perciben por las asignaciones arbitrales que, semana a semana, realizan en los diferentes torneos de la Liga Nacional de Fútbol de Aficionados (LINAFA).
“Algunos dependen al 100%, otros como medio complementario para poder pagar sus estudios o llevar otro aporte al hogar”, destaca la nota.
El grupo indicó que los tres mil árbitros y árbitras, de las 24 asociaciones, siempre han sido respetuosos de las medidas que se han tomado y entienden la situación por la que pasa el país.
“Solicitamos, respetuosamente, que se analice la medida de reanudar los torneos de fútbol aficionado hasta diciembre, ante la situación económica que viven nuestros asociados, que a pesar de los esfuerzos que hemos promovido dentro de LOAAF para apoyarlos y palear esta crisis, se vuelven insostenibles, si la reanudación del fútbol aficionado se da hasta finales del año", cierra el comunicado.
Mientras que en el fútbol profesional, los equipos ya retomaron entrenamientos y se ve cercana la posibilidad de volver a jugar si se respetan todos los protocolos establecidos, aunque en el fútbol aficionado aún la situación se ve lejos.
