Descifrar con exactitud la mentalidad o gusto futbolístico del técnico de Alajuelense, Andrés Carevic, ha sido difícil, el argentino es quitado para señalar en concreto un estilo dado que no es de profundizar mucho en el análisis.
Durante el actual torneo al entrenador se le cuestionó en algún momento que sacrifica el espectáculo con tal de sacar resultados, a pesar que afirma que también quiere que su equipo juegue bien.
Mientras que en el primer torneo al mando de los manudos jugaba muy bonito, pero todos sabemos cómo terminó esa historia en diciembre ante Herediano.
Una manera cómo se le podía plantear el tema viene desde el propio fútbol argentino, tomando un debate que lleva décadas en discusión sobre cómo se debe de jugar y cuál debe ser la prioridad.
Los dos técnicos que han sacado campeón mundial a Argentina desarrollaron su propia tesis, la cual es absolutamente opuesta; César Luis Menotti, campeón del mundo en 1978, defendió que el deporte rey es un espectáculo por lo que a la gente hay que darle buen fútbol como obligación y así será más fácil ganar.
Por su parte, Carlos Salvador Bilardo defendió siempre que en el fútbol lo que cuenta es ganar y que el resultado está sobre cualquier cosa porque de nada sirve jugar bonito y perder, así salió campeón mundial con Argentina en México 1986.
Para no andar por las ramas le preguntamos a Andrés Carevic con cuál corriente se identifica más.
"Para mí hay que tener un equilibrio, pero claro que quiero ganar todos los partidos, independientemente de que uno trata de tener un equilibrio y jugar bien, pero creo que hoy el fútbol es ganar, siempre hay que ganar y más con un equipo como la Liga.
“Uno siempre busca un equilibrio, tener un buen funcionamiento para poder jugar bien, pero ganar es vital, si no se puede jugar bien por circunstancias de lo que ha pasado en el partido, del rival, del campo, del clima o de lo que sea, siempre hay que buscar ganar, eso es lo que busca nuestro equipo”, argumentó.
Con esta explicación tan bilardista dirían en Argentina, le repreguntamos a Carevic entonces si jugar bien no es necesariamente una obligación, sino algo que se da durante los partidos.
"Claro, pero trato en mi filosofía que el equipo tenga un buen funcionamiento y jugar bien, después de ahí hay que ganar, pero a veces no se puede jugar bien o no salen las cosas como se plantean y e igual hay que ganar de cualquiera manera.
“Sumar tres puntos en cada partido es lo importante hoy en día, ya sea jugando bien o mal, pero hay que hacerlo. En síntesis, uno trabaja para jugar bien, pero sino se puede lo importante es ganar”, aclaró.
Con está explicación ya quedó claro cuáles son las prioridades del técnico erizo para que los aficionados sepan bien qué esperar y pedirle a su entrenador.