Un hermoso Toyota Land Cruiser FJ40, del año 1979, causa sensación con su llamativo color verde en los paseos de barro o en las exhibiciones de autos a donde va.
Se trata del carro de Gerardo Hidalgo, tanto padre como hijo, vecinos de Escazú, quienes llevan más de 20 años con ese chuzo. Desde hace unos seis años, lo han modificado y es el foco de atención de muchos de los eventos.
El carrazo se llama Toro, como herencia del apodo de Gerardo Hidalgo padre.
“El carro llega a la familia por medio de un exjefe de mi papá, quien se lo vendió a él. Mi papá siempre ha trabajado con esos carros, es mecánico, así como yo, y siempre le han gustado ese tipo de carros.
“Tiene 20 años con nosotros y se usaba para salir a pasear. Es un carro para siete personas, hasta que hace como seis o siete años, papá me dio luz verde para hacer modificaciones y lo usamos para paseos de barro”, explicó.
“Desde allí hemos estado haciendo las modificaciones; al principio, lo primordial, las llantas, luego se levantó la carrocería y la suspensión, se le metieron accesorios, el motor es de 4.250 cc y le agregamos un supercargador, más todo el trabajo de pintura. Todo lo hemos hecho entre papá y yo”, explicó.
Gerardo Hidalgo hijo también contó que el Land Cruiser siempre fue el sueño de su papá y que, por dicha, logró cumplirlo. Pero esa pasión por ese tipo de vehículos, se la pasó a él y a otros tres hermanos (un hombre y dos mujeres).
“Mi papá tiene 38 años de trabajar en el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y desde que entró a laborar, eran Toyotas para arriba y para abajo, y él era el mecánico. Además, manejaba dos grúas Toyota y siempre fue apasionado de esos carros. Por dicha, se dio la oportunidad con su exjefe y logró comprarlo”, comentó.
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El Toro ahora va a los paseos de barro (paseos recreativos a lugares con dificultad para carros convencionales) y algunas exhibiciones y siempre llama la atención.
“Cuando son paeos de barro casi siempre solo vamos papá y yo, porque son un poco más duros. Ya cuando es paseo familiar, sí va lleno el carro con los siete asientos”, expresó.
“Muchas veces cuando vamos por la calle, muchos conductores sacan la cabeza y dicen ‘qué lindo chuzo’. Llama mucho la atención y nos piden fotos”, añadió.
El carro tiene programada una próxima actividad, el Boro Mud Fest en San Mateo de Alajuela en la pista La Torre.