Esteban Medrano, un joven de 18 años, está dando sus primeros pasos en la Asociación Deportiva Cañas, en la segunda B de la Liga Nacional de Fútbol Aficionado (LINAFA). Su pasión por el fútbol lo ha llevado a superar muchos desafíos, como jugar bajo el intenso sol a pesar de su condición de piel de mariposa.
El nombre médico de esta enfermedad es epidermólisis ampollosa, la cual provoca fragilidad en la piel debido a desórdenes genéticos presentes desde el nacimiento. Esto hace que la piel sea extremadamente sensible, especialmente a la exposición solar, y requiere constante hidratación con cremas humectantes.
Esteban no ha dejado que su condición le impida disfrutar del fútbol. Hace tres meses se unió al club de Cañas, en Guanacaste, y nos explicó cómo maneja el desafío de jugar con esta enfermedad.
“Todo comenzó porque me apasiona el fútbol, pero tengo la complicación de la piel de mariposa, lo que no me permite jugar de la misma manera que mis compañeros. Mi mamá siempre me cuidaba mucho, protegiendo mi piel, ya que no puedo estar mucho tiempo bajo el sol.
“Empecé a jugar fútbol a los 10 años y, con el tiempo, me gustó tanto que se convirtió en parte de mi vida. Desde 2023 he tenido más participación en equipos de LINAFA, y eso me ha permitido mejorar mi rendimiento.
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“Cuando juego, debo cuidar mi piel aplicándome varios tipos de bloqueadores solares y evitando las horas en que el sol es más fuerte, ya que los rayos ultravioleta son más intensos. Además, cuando mi piel se quema, debo hidratarla constantemente porque la capa superior se seca”, explicó.
Esteban juega como delantero y volante, y también enfrenta otro problema mientras juega. Sin embargo, con el paso de los años, ha mejorado y le ha permitido desempeñarse mejor en el campo.
“Tengo otra condición que debo manejar: algunos poros de mi piel siguen cerrados. Antes, estaban completamente bloqueados y no podía sudar. Con el tiempo, mi piel ha mejorado, y gracias a Dios, ahora puedo sudar. Sin embargo, en algunas ocasiones, mi temperatura corporal aumenta y mi piel se pone roja”, compartió.
Mucho apoyo
Al principio, uno de los desafíos fue convencer a sus padres, don Julio César y Joselyn, quienes lo cuidan mucho. Sin embargo, con el tiempo, empezaron a apoyarlo más en su pasión por el fútbol.
“Al principio, a mis papás no les gustaba que jugara por mi condición, pero luego cambiaron de opinión al ver que soy bueno y que el fútbol realmente me apasiona. Siempre me dicen que no descuide mis cremas, pero me apoyan mucho”, explicó.
El cuerpo técnico también lo apoya, permitiéndole disfrutar de cada partido de manera cuidadosa.
“El cuerpo técnico ha sido muy comprensivo conmigo. Me siento aceptado por mis compañeros, quienes entienden cuándo puedo dar el 100% y cuándo no. A veces juego como titular y en otras ocasiones me quedo en la banca, especialmente cuando las temperaturas son altas”, enfatizó.
Sus compañeros también están siempre atentos y listos para ayudarlo en caso de que lo necesite.
Aprendió de un susto
Hace unas semanas, Esteban vivió una experiencia que lo ayudó a conocer sus límites.
“Fue el domingo pasado, cuando excedí mis límites. Jugamos contra Santa Rosa cerca de Tamarindo, en Santa Cruz, a las 11 a. m. El sol estaba muy fuerte y, aunque al principio me sentía bien, cerca del final del primer tiempo comencé a sentirme mal. Tuve un fuerte dolor de cabeza, escalofríos, y me sentía como si estuviera enfermo.
“Al finalizar el primer tiempo, pedí cambio y me fui directamente a bañar”, relató.
Aplicado en el estudio
Actualmente, Esteban combina el fútbol con sus estudios y está enfocado en convertirse en un buen ciudadano en el futuro. Sin embargo, no descarta dedicarse por completo al fútbol en algún momento.
“Es un sueño formar parte de un equipo de primera o segunda división, pero también quiero enfocarme en mis estudios.
“Estudio en la Universidad Técnica Nacional, una carrera llamada Ingeniería Energética con énfasis en energías renovables, que abarca la creación y producción de las cinco energías que se generan en Costa Rica: biomasa, eólica, geotérmica, hidroeléctrica y solar”, concluyó.