EscucharPérez Zeledón sigue sin encontrar el rumbo y este domingo volvieron a caer por segunda jornada al hilo en casa, esta vez ante Guadalupe 1-0, al igual que les ocurrió el jueves pasado contra el Monstruo.
La mejenga contó con técnicos muy tácticos, por lo que el estudio excesivo y la gran cantidad de faltas en la medular provocaron que el partido no fuera tan fluido como la gente esperaba.
José Giacone, técnico isidreño, les ordenó presionar en el medio campo a los guadalupanos y le resultó porque los Guerreros del Sur tuvieron más la pecosas en su poder y llegaron con mayor claridad al marco defendido por Alejandro Barrientos.
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Guadalupe tuvo que desistir de su idea del pase en corto ante la presión ejercida por sus rivales, así que comenzaron a saltarse la media cancha mediante pelotazos para tratar de que los ofensivos pudieran sorprender a la zaga generaleña. Por cierto uno de los goleadores del campeonato, Frank Zamora, pieza clave del equipo de Geiner Segura, no tuvo participación en este encuentro debido a que sumó cinco tarjetas amarillas y tuvo que cumplir un juego de suspensión.
Aunque la mejenga para Guadalupe lucía más complicada que armar un cubo Rubik con los ojos cerrados, Carlos Martínez logró sacarse de la manga una jugada que le daría el gol a su equipo.
En el minuto 25, Martínez corrió por el sector derecho y sacó un centro rastrero que llegó a la izquierda, donde apareció Josué Rodríguez, que con un disparo potente logró batir al portero Byran Segura para marcar el 1-0.
En ese momento a José Giacone solo le quedó levantar sus brazos y preguntar: ¿Qué pasó?
El problema es que el orden defensivo que mostró el Pérez Zeledón meses atrás se perdió por completo y a Guadalupe le tocó aprovechar esa debilidad.
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Como era de esperarse, Pérez se sintió contra la pared y con la espada en el cuello, por lo que se fue encima de Guadalupe, por lo que los pupilos de Geiner Segura aguantaron con todo en defensa y buscaron aprovechar los huecos dejados por su rival para asestar otro golpe.
Tratando de adueñarse de las acciones, José Giacone envió al campo al brasileño Raí, buscando el delantero le diera otra cara a la ofensiva.
Es en este momento del encuentro que Segura mostró que la táctica y la estrategia la maneja muy bien, ya que desde su zona técnica supo ordenar a sus jugadores, especialmente cuando el rival tenía la redonda en su poder e indicándole a sus muchachos cómo cerrar todos los espacios.
Los esfuerzos generaleños pudieron dar frutos, cuando al minuto 62, un centro de Pablo Azcurra se estrelló en la mano del guadalupano Darío Delgado, era un claro penal, pero el central David Gómez, se hizo el ruso y no la pitó, pero sí le quedó fácil señalar una falta que se dio fuera del área segundos después. Los problemas del arbitraje tico se mantienen intactos.
Al final un resultado de oro para Guadalupe que suma en un campo complicado y un dolor de cabeza más para Giacone y compañías que al parecer no encuentran la forma correcta de encontrar el camino que los vuelva a colocar en los puestos de privilegio.
