El Novelón

Joyas delataron a hombre que por avaricia mató a su patrón

A Milton Vargas Herrera, de 72 años, lo asesinaron de un balazo en la sien derecha y lo tiraron en un pozo de 20 metros de profundidad

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Víctor, hermano del finquero Milton Vargas Herrera, percibió el peligro que corría su ser querido con solo ver la mirada de uno de los peones al que este le daba trabajo y comida.

Milton, quien era un sancarleño de 72 años, fue advertido de que el mal lo acechaba en su propia casa, sin embargo, él era tan buena persona que creía que quienes lo rodeaban tenían buenos sentimientos como él; al final se convirtió en víctima de un cruel asesinato, todo por el robo unas alhajas, dinero y un celular.

El atroz homicidio del adulto mayor ocurrió cuando él dormía en su cama, lo mataron de un balazo en la sien derecha, luego lo amarraron a dos sacos con piedras y lo echaron en un pozo artesanal de unos 20 metros de profundidad que estaba en la cocina de la casa.

El responsable de su muerte fue Ulises Evelio Rayo Valle, un nicaragüense conocido como Puro, que le pidió trabajo a Milton.

Rayo fue sorprendido por las autoridades cuando escapaba hacia su país, él iba en un bus por Los Chiles, en la zona norte, y llevaba las pertenencias de Milton, su patrón.

Este salvaje hecho, que conmocionó al país, sucedió en Veracruz de Caño Negro de Los Chiles de Alajuela, la noche del miércoles 17 de setiembre del 2013, este mes se cumplirá 10 años del brutal suceso.

Puro fue condenado a 25 años de cárcel y de acuerdo con el Ministerio de Justicia, continúa descontando esa sentencia.

Los bomberos ayudaron en la extración del cuerpo de Milton Vargas Herrera que echaron en un pozo. Foto Carlos Hernández/Archivo

Advertencia de hermano

Víctor le comentó a La Teja que su hermano nunca se casó y no tuvo hijos, siempre fue muy independiente, era el cuarto de 12 hermanos y tenía una hermana gemela.

Además, era prestamista con la plata que se ganaba en la agricultura, el único lujo que se daba era tener joyas como anillos y cadenas de oro, vivía en una humilde casa de madera, tomaba agua de pozo y todos los días se encargaba de sus siembros para sobrevivir.

“Era muy trabajador, una persona sencilla, lo único era que le gustaba andar alhajas y cadenas, le aconsejé cuando estuve en la casa de él y le advertí: ‘si usted pudiera vender esas alhajas, quédese sin nada, porque eso lo va a llevar a usted a la muerte, haga todo lo posible y deshagase de eso’”, recordó el pariente.

Afirma que no pasó mucho tiempo cuando su presentimiento se hizo realidad.

“Vi al hombre (Rayo) como ansioso, tirándole la mirada a las joyas. Al poco tiempo después fue que apareció muerto (el hermano)”, señaló.

Los allegados de Milton sospecharon que pretendían robarle más que las joyas y el dinero, pero lo dejaron en manos de las autoridades y prefirieron dejar todo en la justicia terrenal y divina.

“Mi hermano le daba trabajo y comida, era un peón sembrando maíz, frijoles en la parcela”, recordó.

Un mes antes del homicidio, Puro le dijo a su patrón que lo acompañara a ver unos siembros que tenía, Milton, como siempre de buena gente, fue, pero algo en el camino lo hizo devolverse. Para Víctor esa fue otra de las señales de que le querían hacer daño.

“Lo invitó a ir a ver una raicilla (un producto medicinal) esa vez mi hermano se salvó porque se devolvió, pero lo iba a llevar a una montaña solitaria donde no tenía nada.

“Por eso fue que yo le dije: ‘vea, Milton, haga todo lo posible y deshágase de eso (los lujos que tenía) porque usted va a morir por medio de eso’”, reiteró el hermano.

Milton tenía 12 años de vivir en ese lugar, mientras que Rayo tenía cuatro meses de estar en la zona.

Inventó agonía de mamá

Víctor mencionó que su hermano pasaba muy solo en la casa, a veces salía a Ciudad Quesada o a Upala, porque prestaba plata e iba a recoger los intereses de ese dinero.

El asesinato de Milton fue descubierto el miércoles 18 de setiembre en la mañana, luego de que una vecina, llamada Tomasa Alemán, viera al peón muy nervioso a eso de las 4 a. m.

“Me dijo que tenía que salir inmediatamente del lugar, ya que le habían comunicado que su madre estaba agonizando”, expresó Alemán a los medios en aquel momento.

Rayo también le mencionó a la señora, el día del crimen, que seis horas antes unos hombres se habían llevado a su patrón en un vehículo con rumbo desconocido.

“Le pregunté por qué andaba el celular de don Milton y me respondió que él se lo había prestado, pero que regresaría a la casa para dejárselo”, recordó Alemán y de inmediato una corazonada la hizo ir a buscar a su vecino.

Ella habría ido con otros vecinos hasta la vivienda y hallaron manchas de sangre en el dormitorio y en el borde del pozo, de inmediato avisaron a la Policía de Fronteras.

Los Bomberos también llegaron al sitio, a extraer el cadáver.

Los hechos

Las autoridades del Organismo de Investigación Judicial determinaron que el homicidio ocurrió la noche del martes 17 de setiembre, cuando el finquero descansaba. Ulises entró a la casa y le disparó con un arma de fuego larga, tipo carabina 22.

Esta arma estaba escondida en una plantación de maíz, a 100 metros del cuarto en el que dormía el peón.

Justamente esa arma de fuego se la pidió a un vecino con el pretexto de ir a cazar, señalaron los medios de comunicación hace una década.

Pidió café

Los lugareños le dijeron a las autoridades que Ulises pasó a una casa pidiendo café y diciendo que se iba, siguió diciendo que a su jefe se lo habían llevado de la casa.

Las autoridades, al saber estos detalles, comenzaron a buscarlo en los buses y lo encontraron cerca, entre los Chiles y el paso fronterizo con Nicaragua. El hombre llevaba cadenas, anillos y el teléfono celular del fallecido.

“Él no hablaba nada, claro, como lo agarraron con las alhajas y el celular, pero a un vecino le dijo cómo estaba el asunto y hasta pidió que le vendieran un café”, señaló Víctor.

Víctor recuerda que cuando se enteró de la tragedia dejó todo botado y se fue a la casa de su ser querido.

“Salí sin tomar café de mi casa, se me quitó el hambre, lo único que quería era llegar rápido a la casa de mi hermano, tardé una hora y quince minutos desde Guatuso hasta Veracruz”, señaló.

Este caso fue llevado a juicio y el Tribunal Penal de San Carlos condenó al tipo el 5 de setiembre del 2014 por homicidio calificado y robo agravado.

“Quedé muy agradecido porque vi que trabajaron duro y muy extenso (los judiciales), sí hubo justicia contra ese individuo.

“A él ni quiero recordarlo (al sospechoso), eso no se termina ahí (con una condena), lo vi una vez y fue suficiente para saber que no era una buena persona, prefiero no hablar ni pensar en ese hombre”, manifestó Víctor.

La sentencia contra Ulises Rayo Valle fue impuesta en el Tribunal Penal de San Carlos. Foto: Archivo

A Milton lo sepultaron en Veracruz de Caño Negro de San Carlos.

Víctor solo conserva la cédula de su hermano, que la guarda como un tesoro, además de todos los recuerdos que compartieron.

Alejandra Morales

Alejandra Morales

Bachillerato en Periodismo en la Universidad Internacional de las Américas y licenciada en Comunicación de Mercadeo en la UAM. Con experiencia en temas de sucesos y judiciales.

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