Don Jorge Martínez estaba acostumbrado a pasar todo el día en compañía de su amigo inseparable, y ahora que no está siente un gran vacío y hasta se le salen las lágrimas cada vez que en la casa hablan del perrito.
Don Jorge Martínez estaba acostumbrado a pasar todo el día en compañía de su amigo inseparable, y ahora que no está siente un gran vacío y hasta se le salen las lágrimas cada vez que en la casa hablan del perrito.