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Una camarera, de una cafetería del centro de la ciudad argentina de San Juan, denunció al ciclista belga Iljo Keisse, de 36 años, por supuestamente haber abusado sexualmente de ella al apoyar sus genitales en su cuerpo cuando posaban para una fotografía que la joven había solicitado a los miembros del equipo Deceuninck-Quick Step.
El hecho se dio el pasado viernes, dos días antes del inicio de la Vuelta a San Juan, cuando los deportistas hicieron un alto en su entrenamiento para tomar un café.
La camarera atendió a los ciclistas y terminó pidiéndoles una fotografía de recuerdo.
“Fue una broma, que no debió haber hecho, pero que no pasa más allá de una advertencia o una multa”, dijo al diario MARCA el responsable de comunicación del Deceuninck.
Keisse ya fue el sábado a la cafetería para disculparse, aunque piensa que era una broma sin mayor intención. El lunes, la joven demandó al corredor en una comisaría de San Juan.
La camarera explicó que se fotografió con los miembros del Quick Step el viernes mientras entrenaban y que, tras varias risas de los mismos y al ver la foto, se dio cuenta que no se habían apoyado en ella de forma accidental, sino que fue intencional el contacto de los genitales de Keisse con su cuerpo.
“No puede venir a otro país a tratar a las mujeres como si fuésemos cosas insignificantes y sin valor. Estoy muy enojada. Yo estaba trabajando y me faltaron el respeto totalmente. Fui a la comisaría, hablé con mis abogados, he hecho la denuncia. Espero que al menos lo sancionen o le llamen la atención", explicó.
El equipo se toma el incidente, de momento, como una molestia y está tratando de que el incidente se olvide rápidamente con una compensación económica.
