La imitadora Katherine González se propuso hace tres años bajar de peso y se terminó enamorando de la práctica del crossfit.
A pesar de que ha logrado reducir bastantes tallas y luce un cuerpo espectacular, ella confesó que siempre pasaba comparando su cuerpo en diferentes etapas y cambios.
Además, que se la pasaba publicando fotos en sus redes del antes y el después, pero que ahora entendió que “no es justo invalidar el cuerpo ni la persona que fui”.
La humorista de Pelando el ojo publicó en su Instagram que después de mucho tiempo comprendió que el ser más delgada o más gruesa no tiene relación con ser “más aceptada, más saludable o menos apta”.
“Sé que puede resultar motivante ver avances significativos en el cuerpo de alguien más, pero, ¿si me siento bien y veo que soy similar a la foto del ‘antes’ de una persona?, podría resultar decepcionante, incluso, alimentaría estereotipos. Porque si bien es cierto muchos dan por un hecho que delgada (es igual a), saludable; gruesa, no lo es. La forma de recibir el mensaje es muy diferente en cada persona y su percepción.
“Desde que entendí esto, me liberé de patrones, de estereotipos y empecé a disfrutar de mis objetivos, de mi cuerpo y todo aquellos avances que no se ven. Disfrutemos el proceso y que nuestro parámetro sea la forma en que nos sentimos”, escribió.
Muchos de sus seguidores le aplaudieron sus palabras y la decisión que tomó, porque al final lo que importa es la personalidad y no el tamaño del cuerpo de las personas, además, de tenerse amor propio.