La escasa asistencia de público y baja participación de caballistas en el tradicional Tope de Palmares, dejaron este jueves con serias dudas el futuro de los festejos cívicos del llamado Pueblo para hacer amigos.
El desfile de caballistas que marca el inicio de las populares fiestas del cantón alajuelense caminó este jueves a medio galope, aunque la Asociación Cívica Palmareña (ACP) sacó el pecho en defensa de los festejos.
Vecinos, comerciantes y público hablaron de la poca asistencia que tuvo la actividad equina, que por años fue la carta de presentación de unos festejos cívicos a los que, en el pasado, había que armarse de paciencia para llegar y estar, por los tumultos que se hacían.
Esas masas de gente son cosa del pasado, lo que facilitó a visitantes de Cartago o San José, por ejemplo, llegar al cantón sin sufrir en las presas y les permitió a otros escoger el mejor lugar para ver el paso de caballos y jinetes; algo que tiempo atrás era imposible.
La escasez de público en el Tope de Palmares no es cosa nueva, pero este 2024, según un sondeo realizado por La Teja, la situación se “agravó”.
El tope de las Fiestas de Santa Cruz (que fue este mismo 18 de enero), la inseguridad que hay en el país y la situación económica podrían estarle pasando factura a los festejos, concluyeron algunos entrevistados.
“Lo que pienso es que las están matando mucho las fiestas de Santa Cruz, pero en lo personal el despelote de Santa Cruz no me gusta”, dijo Juan Jacob Fernández, un palmareño que le agarró el gusto a las fiestas precisamente por la baja de público que tienen ahora.
“No son las mismas”
Seidy Soto llegó desde las 9:40 de la mañana con toda su familia (unas 10 personas) para disfrutar de un tope al que ella asiste desde que tiene memoria. Ella también ha visto cómo con los años, las fiestas se han ido desinflando.
“Nos vinimos temprano para agarrar campo en la sombra, pero ya no son las mismas fiestas de antes, ahora veo muy poquita gente, nadie apuñado y pienso que puede estar afectando el tema de la inseguridad que hay en todo el país. Ahora con tanta violencia, la gente se quita un poquillo de esto”, consideró la vecina de Naranjo.
Nixon Saavedra, quien es comerciante, también encontró mucho menos público en el Tope de Palmares del 2024 comparado con el año anterior.
Él viajó desde San José para vender sombreros en el Tope de Palmares, pero lastimosamente, el negocio no le salió como lo había esperado.
“Está más apagado que en otros años, menos gente porque a esta hora (11 de la mañana) ha estado full, quizá porque coincide con el de Santa Cruz, pero en otros años ha habido más gente y las fiestas de Santa Cruz siempre han coincidido con Palmares. La economía creo que está influyendo”, mencionó.
Margarita Muñoz, de Heredia; Patricia Reyes, de Desamparados, y Carlos Chavarría, de Sarchí, también hablaron de “la nueva cara” de las Fiestas de Palmares y, para ellos, entre menos gente, mejor para el disfrute de todos.
“Lo veo como un poco más flojo comparado con otros años que venía con mis hijos pequeños. Veo que hay menos participación”, afirmó don Carlos.
Se defiende
Pero ante este escenario, ¿qué dice la ACP? ¿Podrían desaparecer las fiestas? La Teja pidió las respuestas a la Asociación, quien dejó claro que Palmares hay para rato. María Fernanda Sánchez Campos, encargada de Comunicación y Mercadeo de la ACP y miembro de la junta directiva de la Asociación defendió la participación de caballistas en el tope.
“A las 2:15 de la tarde tenemos cerca de 1.500 caballistas inscritos. Afortunadamente mantenemos más de la media del aproximado que hemos esperado recibir en los últimos años”, dijo Sánchez.
En cuanto al poco público justificó que los horarios de trabajo de las personas dificultan la presencia de más gente en la actividad, y mencionó que ahora las fiestas tienen un enfoque más familiar, lo que asegura su continuidad.
“Durante años hemos migrado a un estilo de festejos más familiares, donde haya más control y donde las personas, cualquiera que sean las edades y el lugar de donde nos visitan, tengan actividades que hacer así que parte de lo que hacemos como ACP es asegurarnos que todos los protocolos en bienestar animal, y de todos los caballistas y personas que nos acompañan en las calles, es que sea seguro para ellos” , aseveró.
La Teja intentó conversar con Carolina Rojas, presidenta de la ACP; sin embargo, se nos informó que estaba fuera del país.
El panorama de lo que vivió Palmares contrasta con el de Santa Cruz de Guanacaste, que este mismo jueves celebró su tope al que llegaron miles de miles de personas y tuvo una muy importante participación de caballistas.
De hecho, hubo caballistas en Palmares que mencionaron que la participación era poca porque caballistas y gente se habían ido para Santa Cruz.
¿Son las fiestas del cantón guanacasteco los nuevos festejos de inicio de año? Todo parece que sí.