El popular 69, donde ambas personas disfrutan a través del estímulo oral, tiene su hermano menor bastante picarón.
Se trata del número mágico “68”. De hecho, es una variante del 69 pero se caracteriza porque solo una de las personas va a recibir placer. Su atractivo principal es la versatilidad al rotar roles.
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El 68 consiste en que una persona se acueste en sentido contrario del otro y flexione las piernas a ambos lados de la cabeza de la pareja que está abajo, poniendo los genitales frente a la boca para que este le haga sexo oral y recorra el ano con la lengua.
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Como la persona que está arriba es la que disfruta, puede tratar de no dejare caer todo el peso a su pareja, apoyándose de los codos o manos. Además, puede moverse y acercar o alejar los genitales de la boca para hacer el juego más divertido.
Esta variación aumenta el contacto del cuerpo con la superficie de la boca, estimulando a otro nivel.
También, los hombres pueden disfrutar mejor porque la elevación de caderas permite que el pene y los testículos tengas mejor estimulación y acceso.