La actriz costarricense Maribel Guardia está de visita en nuestro país y aprovechó el viaje para ir a saludar a su amigo Rogelio Benavides en su restaurante Estación Atocha.
La guapa no pasó desapercibida y aceptó la invitación de don Óscar López Salaberry, mejor conocido como el Embajador del tango, para bailar de manera elegante pero a la vez sensual y la tica demostró que no es nada quitada, según se ve en un video cortesía de La Esquina 506.
La guapa llegó al lugar de sorpresa junto con dos familiares y, según nos contaron, fue muy agradable para todos los que estaban en el lugar.
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“Hace una semana, cuando nosotros subimos una foto del tango, ella comentó que cómo le gustaría estar aquí. Entonces, yo aproveché para decirle que si quería bailar que me dijera. Cuando se levantó para ir al baño, entró al salón donde estaba lo del baile e, inmediatamente, la gente empezó a aplaudir.
“Se puso a bailar con Óscar, hicieron unos pasos de tango, ella movió sus caderas, mostró su estilizado cuerpo y toda su gracia y su sal, la gente quedó realmente sorprendida porque nadie sabía que ella llegaba ni que estaba en Costa Rica”, dijo Rogelio Benavides.
De acuerdo con el periodista, la tica está en nuestro país para apoyar a su hermana con la quimioterapia que inicia en los próximos días.
Después de la presentación improvisada, la guapa se fue a su mesa y siguió comiendo, pidió una corvina a la plancha y se tomó una copa de vino blanco, después conversó un rato con don Johnny Araya, quien pasó a saludarla.
“Todo fue una bonita sorpresa, porque imagínese cuánto cobra Maribel por una presentación o cualquier aparición, entonces además de ser sorpresivo, fue inaudito verla bailar tango, entonces le salió gratis a los clientes y al restaurante anfitrión”, afirmó don Roge.