Una familia de una zona remota de China adoptó lo que pensaba que era un cachorro, solo para descubrir dos años después que en realidad era un oso.
Su Yun, que vive en un pueblo a las afueras de la ciudad de Kunming en la provincia de Yunnan, compró lo que le hicieron creer que era un cachorro de mastín tibetano mientras estaba de vacaciones en 2016. Los mastines tibetanos son perros enormes con un espeso pelaje negro y marrón. Los machos pueden pesar hasta setenta kilos.
La dueña dijo que inmediatamente se sintió sorprendida por el apetito insaciable de su perro, que lo hizo devorar una caja de frutas y dos cubos de fideos al día. Dos años después, la mascota pesaba 114 kilos y se hacía cada vez más grande. Cuando la mujer notó la habilidad inusual del animal para caminar sobre dos patas, su desconcierto se convirtió en alarma. La creciente sospecha de la dueña sobre la verdadera naturaleza de su mascota no le sentó bien porque admitió que le tiene “un poco de miedo a los osos”.
Por eso se contactó con las autoridades correspondientes, quienes rápidamente identificaron a su supuesto perro como un oso negro asiático, que está clasificado como una especie vulnerable y que puede llegar a pesar hasta 180 kilos.
La extraña historia fue reportada por primera vez por The Independent en 2018, pero se volvió viral nuevamente esta semana. El oso de Su, que había vivido en su casa todo este tiempo, tuvo que ser tranquilizado antes de ser llevado al Rescate de Vida Silvestre de Yunnan porque el personal que llegó para recogerlo estaba demasiado asustado para interactuar con el animal salvaje mientras estaba completamente alerta.
Un video filmado por un medio de comunicación chino en mayo de 2018 mostró al gran oso con un pelaje negro brillante y una marca blanca inconfundible en el pecho, que es el sello distintivo de la especie, masticando una naranja dentro de una jaula. Las autoridades informaron en ese momento que el oso estaba viviendo una vida saludable en su nuevo hogar.
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Los osos son uno de los animales terrestres más inteligentes, de acuerdo con la organización World Animal Protector. Además, tienen cerebros más grandes y complejos en comparación con otros mamíferos.