(GDA/Colombia) Todo ocurrió en febrero de 2022. Diana, una niña de solo 12 años, había llegado a su colegio y, como siempre, disfrutaba de su jornada escolar. Pero un juego se había convertido en moda. Sus compañeros la retaban para que le pidiera un beso a su profesor. Quien se atrevía, de alguna manera, gozaba de una especie de popularidad. Con lo que no contaban era con la respuesta del docente.
En vez de negarse y dejar claro que no era un comportamiento adecuado, lo que hizo fue decirle que en ese momento no podía. Desde entonces comenzó a hacerle una especie de seguimiento a la estudiante y, horas más tarde, la condujo al salón de informática del colegio, donde la besó.
La estudiante, a pesar del juego, estaba en shock. Luego el docente procedió a realizarle tocamientos libidinosos. Fue explícito en decirle que quería tener relaciones sexuales con ella. La estudiante, ya presa del pánico, sin saber cómo reaccionar, le decía que no. Pese a esto, el educador logró que la joven mantuviera conversaciones con él a través de la aplicación de WhatsApp.
“Todo el tiempo le hizo propuestas de carácter sexual. Le pedía que se reunieran en diferentes partes y hasta le hablaba a la niña de fantasías eróticas”, dijo la fiscal del caso.
De ahí en adelante los abusos fueron constantes durante un mes. El docente la buscaba y la inducía para esconderse en sitios apartados del colegio o en los salones vacíos y allí llevar a cabo los ultrajes a la menor de edad. Había una especie de coerción psicológica para que la estudiante accediera, debía utilizar las palabras adecuadas para convencerla. Fue así que los abusos se produjeron hasta el 15 de marzo de 2022.
La última vez el abusador quiso llegar más lejos y ahí fue cuando la niña sacó fuerzas, lo empujó y logró escapar del salón. De todo esto se dio cuenta la madre de la menor tras notar que su hija venía teniendo comportamientos extraños, incluso, se tornaba más rebelde y tenía cambios en su estado de ánimo. ç
“Un día, tras una discusión con mi hija, la castigué y decidí quitarle el teléfono celular. Ahí fue cuando me di cuenta de una serie de conversaciones que ella tenía con su profesor”, declaró la madre de familia cuando puso la denuncia ante la Fiscalía General de la Nación.
Rápidamente, la familia de la estudiante se enteró de que el profesor del colegio donde estudiaba la menor se estaba aprovechando de ella dentro de las instalaciones de la institución. “No tuvo otra opción que contarme todo lo que estaba sucediendo. Fue terrible saber todo eso”, dijo la mujer.
El relato de la menor fue contundente, y lo que procedió entonces fue la labor de los investigadores del caso para recopilar la mayor cantidad de pruebas posible. Pronto ubicaron al docente y, por orden judicial, fue capturado el 19 de abril del 2022.
Este hombre fue imputado por los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado, actos sexuales con menor de 14 años, en concurso homogéneo y sucesivo. Aunque el docente no aceptó los cargos, la declaración de la joven fue muy contundente, así como los elementos materiales probatorios recopilados por los investigadores a cargo del caso.
Hoy la menor tiene acompañamiento psicológico pues llegó a pensar que no era una víctima por acceder, según ella, de forma voluntaria. En ningún caso un adulto, con una posición de poder, se puede aprovechar de una menor de edad. “El juicio está en curso y pronto se sabrá la pena que tendrá que pagar este docente”, dijo la fiscal.