Bryan Ruiz, el capi de la Sele, adelantó para este martes 25 de julio la romería la la basílica de los Ángeles en Cartago.
El espigado volante caminaba como uno más, entre decenas de personas, acompañado de algunos allegados.
"Bryan, para La Teja, ¿podemos conversar? "No puedo dar declaraciones", explicó el futbolista, sin embargo, autorizó a publicar las fotos.
El orgullo de San Felipe de Alajuelita iba bien empunchado y dispuesto a complacer a los aficionados que lo reconocieron.
Un niño le pidió una fotografía y el Capi accedió con amabilidad. En la foto salieron tres personas más junto a la Comadreja, al que nos topamos en las cercanías del centro comercial Metrocentro, en la esquina de la nueva sede del INA, en Cartago.
Ruiz pertenece al Sporting de Lisboa, Portugal y se ha rumorado que el club lo está vendiendo, aunque aún tiene contrato. Nada es oficial. A lo mejor, por ahí podía haber alguna petición del volante a la Negrita.
El Caribe llegó a la basílica
Quienes sí tenían una promesa que pagar eran Arleth Hernández y Francisco Sojo, quienes aseguran que la pequeña Yeysy Jiménez está sanita gracias a la Negrita.
"Venimos a presentarle a la bebé porque durante el parto se complicó y se la encomendé a ella y ahora tiene seis meses y está perfecta", dijo Hernández. Ellos viajaron desde Bananito en el Valle La Estrella, en Limón y la madre entró de rodillas a la basílica.
Este martes había mucha gente del Caribe basílica porque a la diócesis de Limón le correspondía el tercer día de la novena a la Virgen de los Ángeles.
Virginia Buitrago, catequista en Amubri de Talamanca, fue una de las que madrugó para agarrar la excursión. Ella tenía un motivo muy especial para agradecer.
"Mi esposo tomaba mucho licor, ya me había resignado a que nunca iba a dejarlo. Un día la Virgen de Los Ángeles visitó Amubri en 1998 y puse ese día mis esperanzas en ella y 7 meses después dejó de tomar y hasta la fecha", expresó la mujer.
En los alrededores de la basílica también se podían observar varios sacerdotes de dicha diócesis que estaban haciendo confesiones, como el padre Freddy Hernández.