Nuestro ejército, o sea, el personal de salud del país, contará con un arma más para derrotar al coronavirus.
El presidente ejecutivo de la Caja, Román Macaya, comentó este martes que se fabricarán 600 mil protectores faciales para proteger a los guerreros que están en la primera línea de batalla contra el peligroso virus.
Esta semana se entregarán los primeros 100 mil, los cuales serán diseñados por la empresa Grupo Vargas y cada uno tiene un costo de 600 colones.
La fabricación de estas caretas se da gracias a una coordinación entre la Gerencia de Logística de la Caja, el Área de Salud Ocupacional, la Cámara de Industrias, el Tecnológico de Costa Rica (Tec) y el Incae.
Macaya añadió que en este momento es difícil conseguir este tipo de equipos, pues los mercados internacionales siguen saturados, por lo que comprar estas herramientas en el país es de gran ayuda.
“Con esto se soluciona un problema de protección, no solo de los ojos, sino de la cara completa. Los anteojos de protección han sido de difícil acceso”, manifestó Macaya.
Nueva compra
Macaya destacó el apoyo de empresas como Hyundai, Toyota y correos en la entrega de medicamentos a domicilio.
Por ejemplo, al lunes 6 de abril se entregaron medicinas a 48.746 pacientes con enfermedades crónicas y de ellos, más de 15 mil fueron pedidos a través del servicio telefónico 905-MISALUD (905-647-2583).
Además, se dio a conocer que el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) donó 26 mil pruebas de diagnóstico.
La Contraloría General de la República (CGR) autorizó a la Caja a comprar un reactivo para la detección automatizada, cuyo monto máximo es de $2.340 millones (un poco más de ¢1.300 millones).
También se autorizó al Hospital San Vicente Paúl, en Heredia, a comprar cuatro ventiladores pulmonares para cuidado crítico, cuyo costo máximo es de $106.780 por los cuatro (unos ¢61 millones).