Todos los días se desperdician decenas de toneladas de alimentos en el país y en el mundo.
En algunos casos, los productos se pierden en el proceso de producción y otros en la fase de consumo final, ya sea en supermercados, restaurantes o en los hogares.
Disminuir la pérdida o desperdicio de comida en las casas es posible, tomando en cuenta una serie de recomendaciones.
Víctor Milla, representante oficial de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en Costa Rica, explicó que cuando se desperdicia comida, se desaprovecha mano de obra, dinero y recursos valiosos (como semillas, agua) que se emplean en la producción de los alimentos.
“El desperdicio de alimentos aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuye al cambio climático”, mencionó.
A continuación, le brindamos una serie de consejos para no despediciar comida en el hogar:
- Sirva en pequeñas cantidades: coma porciones de comida más pequeñas y comparta con sus amigos si va a un restaurante, en caso de que las porciones sean muy grandes.
- Congele la comida que le sobró: lo que quede en el plato guárdelo de inmediato en el congelador, en un recipiente con tapa para otro día o utilícelo en la preparación de un plato diferente. La comida no debe dejarse a temperatura ambiente durante más de dos horas.
- Compre únicamente lo que necesite: haga una lista de lo que necesite y procure seguirla. No compre más de lo que puede consumir.
- Deje los prejuicios de lado: compre frutas y verduras que se vean “feas”. Están en buenas condiciones para ser consumidas, solo que su aspecto es un poco diferente.
- Revise la refri: almacene los alimentos a una temperatura de entre 1 y 5 grados centígrados, para darles frescura y aprovechar su vida útil. Trate de consumir los productos que había comprado anteriormente. Coloque los productos más viejos al frente y los más nuevos los mueve hacia dentro.
- Compruebe la fecha de caducidad: tenga en cuenta la información de las etiquetas: “Fecha de caducidad” significa que ese alimento sólo puede consumirse con seguridad hasta la fecha señalada. “Consumir preferentemente antes de:” indica que ese producto mantendrá la calidad esperada hasta la fecha señalada. Si la fecha de consumo preferente de un producto ya pasó, no quiere decir que no sea seguro.