El enjuague bucal que Rodolfo Piza le recetó a Antonio Alvarez Desanti en el debate de Canal 7 la noche del martes desvió la atención de muchos hacia la broma, que a algunos no les cayó muy bien.
La ocurrencia del socialcristiano hacia el verdiblanco terminó "infectando" la recta final de las elecciones del próximo domingo 4 de febrero que, además, están en el limbo en cuanto a quién podría ganar. Algunos sostienen que de fijo habrá segunda ronda.
La invitación a enjuagarse la boca dominó las redes sociales desde el momento en el que se dio y este miércoles seguía picando en las conversaciones.
Guillermo Carazo, jefe de campaña de Piza, explicó que lo que hizo el candidato es algo muy propio de él y que lo puso en práctica para hacer un llamado de atención a mantener una campaña de altura y propositiva, no basada en engaños o mentiras.
"Rodolfo Piza se jugó el chance de sacar un as bajo la manga al devolverle lo sucedido un día antes en el debate de Monumental, cuando Antonio (Álvarez) aprovechó la lucha entre el doctor Hernández y Piza para aplicar la táctica de 'matar con cuchillo ajeno'. El socialcristiano optó por un ataque directo y frontal para marcar la cancha", explicó el politólogo Gustavo Araya.
Pero Araya dice algo más: "Mandarlo a enjuagarse la boca fue un golpe bajo. Definitivamente sí le resta puntos a Antonio, pero no quiere decir que se los sume a Piza; por el contrario, borró elementos de diálogo y entendimiento que él mismo pudo haber construido durante el debate".
Para el politólogo, en redes sociales quedó clarísimo el posicionamiento del socialcristiano por este hecho y no por sus ideas o propuestas de cara a las elecciones.
Piensa parecido el también politólogo Claudio Alpízar, quien explicó que por no ser el estilo característico de Piza le ayudará a ganar electores, pero sí le hace mucho daño a Álvarez Desanti, quien quedó impactado.
"Pudo haberle devuelto el guantazo y no lo hizo", señala Alpízar.
El verdiblanco no encontró la forma de reaccionar.
Piza da sus razones
Según el candidato socialcristiano, él llevaba el enjuague en la bolsa interna del saco para defenderse si lo atacaban injustificadamente.
"Me he dedicado toda la campaña a presentar propuestas, a exponer soluciones para los problemas del país y de las familias. Por eso no he atacado a nadie, pero tampoco puedo aceptar que me hagan campaña sucia basada en ataques personales. No se vale que les mientan a los ticos por tratar de ganar votos. Me reservo el derecho a la legítima defensa y eso fue lo que hice", explicó.
Desanti lo toma con humor
Alvarez Desanti ve lo ocurrido como el reflejo de debilidad de Piza.
"Creo que le ha costado manejar las tensiones de última hora. Esto de la política es muy tenso y uno debe mantenerse sereno. Creo que se enteró antes de iniciar el debate que va de quinto en las encuestas y eso lo alteró", indicó el liberacionista.
En cuanto a su reacción, asegura que sí le respondió, pero no cayó en su juego y lo hizo dentro de su libreto. "Le dije que no se enojara, que si él había sido débil y no había defendido las pensiones de las personas con parálisis cerebral no era mi culpa y que no debía molestarse conmigo, yo me basé el el informe de la Defensoría", dijo don Antonio.
"Me hizo mucha gracia el apoyo del Colegio de Odontólogos por estar promoviendo la salud bucodental", dijo entre risas el verdiblanco.