Cuando es día de elecciones nacionales la escuela Carlos Sanabria Mora, en Pavas, es el trapito de dominguear de expresidentes como Óscar Arias y Abel Pacheco, del alcalde de San José, Johnny Araya y de presidentes electos en segunda ronda como Carlos Alvarado, porque la prensa llega por puños a sacar fotos y a hacer videos del voto de esas figuras.
Sin embargo, este centro educativo es como bien nos lo dijeron, un "tugurio a punto de incendiarse”.
El pasado 1 de abril, día de la segunda ronda para elegir presidente de la República, antitos de que llegara a votar el flamante recién electo presidente Alvarado, le dedicamos unos minutos a darnos un vueltín por esa escuela y casi nos vamos de espalda cuando comprobamos que lo que no está hecho leña, está jodido y lo que no está jodido está medio malo.
Los baños de los chiquitos, las aulas, los pabellones, los pisos, los lavatorios, los cielo rasos, en fin, todo está pa’l tigre, todo roto y la mayoría no sirve.
El día de las elecciones tuvieron que poner baños plásticos, de esos portátiles que ponen en Zapote o Palmares durante las fiestas, porque los que usan los niños no sirven. La instalación eléctrica da pena ajena, está llena de remiendos y es de esas que los bomberos dicen que por favor no tengamos nunca en la casa.
Lo más increíble es que ya se tienen los ¢2.700 millones para construir la nueva escuela, pero uno de los miembros de la pasada Junta de Educación asegura que los actuales integrantes fueron mal nombrados y ha puesto recursos de amparo y tiene todo trabado.
Esa trabazón provoca que 1.050 alumnos, 87 profesores y personal administrativo, 250 pequeñitos del kínder y 20 profes para ese kínder, se apeloten todos los días en condiciones muy difíciles.
Por eso conversamos con el director, don Luis Soto, quien con un profundo dolor en el corazón nos confirmó que darles clases a los chiquitos de Pavas en ese centro educativo es una bomba de tiempo.
“Esta escuela no está mal, no está muy mal, no está muy muy mal, está pésima, es un tugurio que en cualquier momento se incendia, está terrible. Lo peor de todo es que nadie nos escucha, nadie nos ayuda. Aquí viene Óscar Arias a votar o varios diputados de los lugares finos de Pavas, pero solo vienen a eso, nadie ayuda.
“Ahora resulta que también en esta escuela votó el próximo presidente de Costa Rica y nosotros seguimos con paredes agrietadas que están a punto de caernos encima, con una instalación eléctrica que en cualquier momento alza fuego… con mucho dolor aseguro que estamos a un toque de una desgracia”, nos confirmó don Luis Soto, el director de la Carlos Sanabria.
Proyecto empantanado.
El gran sueño de todos en esa escuela está en un proyecto que tiene tres años empantanado en el departamento de infraestructuras educativas del Ministerio de Educación: una moderna escuela de dos pisos que cumplirá a cachete con la ley para personas con capacidades especiales y cumplirá a cachete y medio con las exigencias de Bomberos.
“¿Qué quiere que le diga? ¡Ya todo está! Están ya apartados los 2.700 millones de colones que se necesitan para el nuevo edificio, todos estamos poniendo de nuestra parte para ubicar un lugar que nos albergue durante la construcción. Hay voluntad entre administrativos y educadores, pero nos tienen todo frenado y empantanado… uno no puede creer que estando el dinero desde hace más de un año, el Ministerio de Educación no agilice todo para el inicio de las obras”, confirmó don Luis.
Y es cierto, ya los planos están completos, aprobados y listos, todos los permisos tramitados, no hay ni una traba, pero los chiquitos de Pavas siguen asistiendo a una escuela con problemas profundos de infraestructura. Hablamos de los problemas de verano, ni siquiera desea hablar el director de los bejucos cuando comienza el invierno y parece que llueve más en las aulas que en la calle, incluso, el año pasado sufrió una inundación que suspendió las clases por dos días.
Trabas y más trabas.
Wálter Muñoz Caravaca, el mero mero del departamento de infraestructura del Ministerio de Educación, quien es el que tiene la autoridad para darle el banderazo de salida al proyecto, también confirmó que ya absolutamente todo está listo para iniciar lo que él mismo considera será una escuela modelo en el país.
“Todo está, es que no falta absolutamente nada, hasta la plata se tiene, pero hay un problema con la Junta de Educación de la escuela, porque al vencer el período de la anterior y nombrarse la nueva, uno de los miembros de la pasada asegura que los nuevos fueron mal nombrados y ha puesto recursos en la Defensoría de los Habitantes, recursos de amparo y ahí es donde todo está empantanado”, afirmó Muñoz.
Explicó el jefe de infraestructura que incluso el Concejo Municipal de San José no ha podido oficializar la nueva Junta de Educación por los problemas de esos recursos de amparo, entonces no hay todavía una autoridad que le ponga las firmas necesarias al documento definitivo que inicia las obras.
“Ya el Ministerio está caminando, de hecho, vamos a apurar el traslado de todos los estudiantes a un edificio que se alquilará para los casi 12 meses que durará la construcción de la nueva escuela. Hay tres opciones de alquiler y se está valorando cuál es la ideal, no nos vamos a esperar a que el problema con la Junta Educativa se resuelva.
“Lo que se va a construir es un superedificio, con planos de última generación, será una escuela modelo para todo el país, por eso estamos interesadísimos en que todo camine pero ya no pasa por nosotros sino por la Junta Educativa”.