“El nuevo presidente abrirá la puerta para entrar a una casa desordenada, con pocos muebles y muy endeudada, la verdad, o nos unimos todos a ayudarle o ahora sí nos va pero bien mal.
"El Gobierno que recién sale no agarró el toro por los cuernos, fue un gobierno de mucha ensalada, uno que otro postre y casi ningún plato fuerte… quedamos con hambre y sin plata”. Así de sincero y directo fue el exministro, exdiputado y expresidente del Partido Liberación Nacional Francisco Antonio Pacheco cuando conversamos con él sobre lo que deja Luis Guillermo Solís.
Para Pacheco el peor pecado que cometió Solís fue que nunca se metió en serio a resolver los problemas grandes del país, como el déficit fiscal, y cuando trató de hacerlo ya lo había agarrado el tren del adiós.
“Fueron cuatro años de mucho disfraz, mucho baile, mucho piano y lo realmente importante no caminó. Con el poquito plato fuerte no nos llenamos, quedamos hambrientos, sin plata y muy enredados con las cuentas… la cosa no quedó bien”, agregó.
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“Se anduvo por las ramas y no se concentró en meterle machete al árbol. Fue una presidencia muy dispersa en asuntos superficiales y eso es jodido porque el país se traba o no sigue un rumbo para salir de sus problemas y cuando usted no sale de problemas se mete en más, como nos pasó. Hizo falta mucha seriedad presidencial”, indicó.
De gripe a calentura
El problemón que tiene con la peluca parada a Pacheco es que Luisgui recibió el chiquito con gripe y lo está dejando con un calenturón de los once mil. “Se tenía que gobernar para lo que realmente ocupaba el país y no para complacer a la gente, no son tiempos de pensar primero en caer bien porque entonces sucede que los problemas se agrandan y lo que pudo controlarse hace cuatro años ahora es una bola de nieve grandísima, como es el caso del déficit fiscal, que se tuvo que tratar de curar desde el inicio de la administración y no al final a las puras carreras”, explicó.
Le quedó muy claro que aquella frase del presidente Solís al inicio de su gestión de que sería el gobierno del verdadero cambio, se quedó en eso, en una frase, porque el cambio, a su criterio, jamás llegó. “Imagínese que incluso con el déficit fiscal el asunto se puso peor porque hace cuatro años se comenzó dándole más dinero incluso del que pedían las universidades, eso aumentó el déficit, por eso, la cosa pasó de castaño a oscuro”.
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Además de que la casa queda desordenada, sin plata y endeudada, también, para Pacheco, queda enjaulada porque la corrupción y la inseguridad nos golpearon sin piedad en los últimos cuatro años. “La corrupción en todos los niveles estatales es sorprendente, incluso asusta. La inseguridad crece día con día. Al nuevo presidente le toca un tremendo reto, la verdad que como todos estamos metidos en este bote, lo mejor que podemos hacer es ayudar como dije porque si no el agua nos llegará más arriba del cuello… la casa queda mal y con problemas serios, superserios”, comentó.
Luisgui responde
Antitos de entregar su último informe de labores a los 57 nuevos dipus, el presidente Luis Guillermo Solís se refirió, a las carreras, a lo que dijo Francisco Antonio Pacheco sobre sus cuatro años de administración.
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“Tal vez después de ver los 100 hitos que presentamos y los otros 100 que están en este documento, tal vez don Francisco Antonio pueda hablar con un poco más de objetividad. Es un hombre honesto, un hombre respetable y yo creo que la crítica no debe desmerecer los méritos de una administración que hizo algo más que un puente y realizó algo más que muchos viajes”, respondió.