EscucharDespués de todo lo que pasó Albert Alejandro Solera en tercer grado, cuarto será un queque para él.
Este pequeño vecino de Horquetas de Sarapiquí, de 9 años, fue atacado por un chancho de monte el 6 de febrero del año pasado y pese a que pasó un mes internado, Albert superó los días difíciles y ¡ganó tercer grado!
No fue fácil. Albert estuvo cerca de perder el año por las complicaciones, ya que el chancho lo mordió en su pierna izquierda y en la mano derecha. Debido a eso lo tuvieron que operar en varias oportunidades para que recuperara la movilidad, sobre todo en la manita derecha, que es con la que escribe.
Lo duro ya pasó
Don José Alberto Solera, papá de Albert, dijo muy alegre que su hijo está con toda la pata para iniciar este nuevo curso lectivo.
"Ya Albert está bien, se ha recuperado demasiado bien de sus heridas, está contento, volvió a jugar y está deseando entrar a clases… por dicha aquellos días difíciles del año pasado ya pasaron”, comentó don José.
Sin embargo, que Albert vaya para cuarto grado, es en parte gracias a la comprensión y ayuda que le tendieron el año pasado en la escuela Flaminia, en Horquetas de Sarapiquí.
Todos los profesores colaboraron para que el pequeñito se pusiera el día con la materia, después de casi dos meses de ausencias. Además le repusieron los exámenes que debía.
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“No crea, Albert tuvo que ponerle bien bonito para pasar. Nosotros le dijimos que si quería entrar a cuarto grado debía fajarse mucho con la estudiada y así lo hizo. A pesar de lo difícil de sus heridas y el dolor que algunos días sentía, no dejó de estudiar.
“Hubo grandes ayudas en la escuela e, incluso, de sus compañeritos que le prestaban los cuadernos para que se pusiera al día. Mucha gente ayudó. La profesora de Albert, Silvia Artavia, fue importantísima porque ella estuvo siempre pendiente y siempre ayudó. Se ganó el año en familia y gracias a mucha gente que colaboró”, explica don José.
Volvió a jugar
Albert pasó todo el segundo semestre del 2019 entre la recuperación de las heridas y los exámenes finales; eso sí, después del deber, viene el placer.
“Por dicha ya pudimos volver a verlo jugar en diciembre, algo que no hizo en todo el año pasado. Una vez que confirmó que ganó tercer grado, pudo dedicar todo su tiempo a divertirse… le hacía mucha falta”, reconoció el papá.
Lo que tiene más contenta a la familia es que la mano derecha de Albert ya está flojita y en las pruebas que ha hecho puede escribir puras tejas.
“Cuando estaba en el hospital a Albert le dolía mucho no poder ir a clases, después lo golpeó no poder usar el lápiz para los apuntes de la escuela. Gracias a Dios esos días ya pasaron y él está con mucha energía y muchas ganas de entrar a cuarto grado”, aseguró el tata.
El accidente
El día del ataque, don José Alberto limpiaba un lote con la motoguadaña. El animal se salió del chiquero en el cual lo tenía un hombre como mascota, persiguió al chiquito que estaba jugando y lo mordió varias veces, el papá tuvo que fajarse duro para quitarle el animal de encima al menor.
El chancho de monte fue decomisado por el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) y lo llevaron al Centro de Rescate La Marina, en San Carlos. Este tipo de animales son silvestres y las autoridades sancionan a quien los tenga como mascotas.
