Ofelia Taitelbaum, la exdefensora de los Habitantes, amaneció este viernes en la cárcel Vilma Curling, más conocida como el Buen Pastor.
Luego de años de procesos de apelaciones y reclamos, finalmente, la Sala Tercera determinó que la sentencia de Taitelbaum quedaba en firme y a la exjerarca no le quedó más remedio que entregarse este jueves por la noche a los Tribunales de Goicoechea para que la llevaran a la cárcel.
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Ella deberá descontar una pena de siete años y seis meses por uso de documento falso.
Taitelbaum, además de Defensora de los Habitantes, fue ministra de Vivienda y también diputada. Ella fue acusada por 29 delitos de uso de documento falso y dos de coacción.
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La Fiscalía aseguró que ella hizo declaraciones de renta, pagos y firmas entre el 2009 y el 2014, usando el nombre de María Otárola, una costurera de Ciudad Quesada, en los cuales garantizaba que le había hecho pagos de entre tres y siete millones de colones por supuestas asesorías en ese periodo.
En el juicio en su contra, Taitelbaum aseguró que no había detectado el delito de uso de documento falso, porque siempre confió en sus contadores.
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También dijo que ella es un ser humano con sentimientos y no un “monstruo” como, según ella, la describieron los representantes del Ministerio Público y de la Procuraduría.
Este caso fue descubierto en diciembre del 2013, luego de que la costurera se diera cuenta de que usaban su nombre en documentos falsos como vendedora de asesorías.
Todo eso ocurrió para que Ofelia presentara declaraciones tributarias de sus empresas.
La exdefensora también fue condenada a pagar ¢5 millones por daño social.