Nuestro billete de 20 rojitos, ese que tanto chineamos y que tan rápido se va en cuanto lo cambiamos, tiene un casi gemelo nicaragüense que vale menos y que algunos han utilizado para estafar.
“Sí señor, están tratando de metérnoslo en los comercios que atendemos muchas personas, sobre todo en horas pico. Me lo han tratado de meter en tres ocasiones, pero he logrado darme cuenta a tiempo, pero en la tercera casi, casi, lo logran. No ve que son igualitos y uno en la carrera no pone mucha atención”.
Eso nos lo dice don Víctor Alfaro, del tramo Blanco, en el Mercado Central de San José.
El gran problema es que el billete nicaragüense equivale a 349 colones y por eso se ha puesto de moda entre los estafadores, que siempre andan viendo a quien se llevan entre las patas, sobre todo a personas mayores, pero no son ellas las únicas que han caído.
“Le voy a decir algo, yo tengo más de sesenta años de trabajar en el Mercado Central, en este tramo que tiene más de ochenta años de existir. Puedo asegurar que soy un cajero con buena experiencia y por eso logré evitar tres veces que me metieran ese billete, pero un cajero nuevo, alguien con poca experiencia, se va en todas. Hay que tener demasiada buena vista y estar muy atento, entre tanto movimiento en un mercado, usted ni cuenta se da”, advirtió don Víctor.
Revisar bien
Contactamos a don Erick Ulate, presidente de Consumidores de Costa Rica, quien nos confirmó que ya ellos tienen conocimiento del timo del billete de 20 córdobas; de hecho, a él mismo ya le trataron de meter uno falso, pero de cinco mil colones.
“Nuestra recomendación es que los consumidores revisen bien cualquier billete que reciban para evitar fraudes. En mi caso personal en un vuelto de veinte mil colones me dieron tres de cinco mil de los de algodón y trataron de meterme uno falso, entre dos verdaderos. Es necesario tener mucho cuidado. Hay contar los vueltos o los billetes frente a quien nos los da”, aconseja don Érick.
En el recorrido que hicimos, después de haber conseguido un billete de 20 córdobas, le preguntamos a doña Margarita Ruiz, de Hamburguesas Junior’s --la ventanita que tiene 46 años de existir al costado oeste del parque Central josefino-- si ella sabía de la situación y nos dijo que sí, pero que jamás había visto el billete nicaragüense, entonces nos lo pidió para observarlo.
“Todavía no nos han tratado de meter un billete de estos. Yo algo había escuchado, pero desconocía cómo era ese billete de veinte córdobas, la verdad; ahora que ustedes me lo enseñan me quedo muy alerta porque sí se parece mucho al de veinte mil colones”, nos dijo al tiempo que llamaba a su compañera, Tania Ibarra, quien no sabía nada, para que viera el billete y grabara bien la imagen, por aquello.
Igualiticos
Doña Marineth Alpízar, quien trabaja en la floristería Doña Grace, a la par de la tienda La Gloria, nos comentó: “Nunca lo había visto y la verdad, ahora que lo veo, sí me lo hubiesen metido porque es demasiado parecido. Hay momentos en que uno está en carreras atendiendo clientes y en esas carreras ni se fija bien en el tipo de billete, solo en el color. Voy a tener mucho cuidado de ahora en adelante”.
A una que se le paró la peluca fue a doña Cristina Ulla, vendedora de lotería, porque ni sabía del tema, ni había visto el billete.
“Le puedo decir que me salvé, no me hubiese dado cuenta, entre tanto billete que uno maneja, me lo hubiesen metido facilito. Algo había escuchado, pero como uno no conoce el billete, piensa que nada que ver, que no puede ser tan parecido, pero al enseñármelo ustedes, me quedo helada porque son idénticos”, dijo.
A mediados del año pasado, el Banco Central confirmó que el billete de ₵20 mil --también los de ₵5 mil y el de ₵10 mil-- cambiaría de material, dejando en el pasado el papel para ser de sustrato de polímero (popularmente les dicen billetes de plástico).
“Si bien los nuevos billetes presentan ajustes en su diseño y en su estructura de medidas de seguridad para comprobar su autenticidad y combatir la falsificación, mantienen los mismos personajes, motivos, tonalidades y tamaños que los que circulan actualmente (ver imágenes al final del comunicado).
“El sustrato de polímero da una mayor durabilidad a los billetes, los hace más seguros, y permite un adecuado reciclaje de los desechos una vez que cumplen su vida útil”, explicó el Central en un comunicado de prensa.