Costa Rica se está cayendo a pedazos, ya pasamos los 500 homicidios, el presidente no hace nada más que berrinches, el costo de la vida no baja y... Fabricio Alvarado propone, en la Asamblea Legislativa, que se vote contra el acto de inauguración de los Juegos Olímpicos París 2024.
Lo peor de todo no es que Alvarado se preste para semejante pérdida de tiempo, sino que se aprobara con 22 votos a favor y 21 en contra.
Por lo que veo, a los diputados de este país les sobra demasiado tiempo, porque si estuvieran ocupados en cosas realmente importantes, a este tipo de propuestas no se les daría ni medio minuto.
Si hubo o no hubo personas ofendidas me es indiferente, porque fue un acto fuera de nuestras fronteras y sin recursos del Estado, como para que el Congreso de un país esté haciendo cucharas.
O, entonces, cada vez que en televisión salga algo que me ofenda a mí, voy y le pido a los diputados que usen su valioso tiempo para rechazarlo con una votación. Sea más serio, Fabricio, y póngase a bretear en lo que Costa Rica realmente necesita.
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Ojalá en las próximas elecciones, en las que no descarto que Alvarado se vuelva a mandar de presidente, no se nos olvide para qué quiere gobernar.
Don Fabricio, por ejemplo, a muchos no nos gusta como usted canta, ¿y qué le vamos a hacer?