Nacional

OPINIÓN: Diputado de Restauración defiende con firmeza el octavo mandamiento

Fabricio Alvarado y sus fieles de Nueva República reprendidos por el pastor limonense Eduardo Cruickshank

EscucharEscuchar
“Mienten y no les importa polarizar con el engaño”, declaró Cruickshank. Fotografía José Cordero (Jose Cordero)

A lo largo de esta semana La Teja, en su página 2, ha estado presentando ejemplares historias de los protagonistas de la campaña Sí, acepto, que busca mejorar la comprensión y el respeto hacia la comunidad LGTBQ de cara al matrimonio civil igualitario, que será una realidad en nuestro país a partir del 26 de mayo del 2020.

Y dentro de este contexto es digna de aplaudir y reconocer la posición del diputado Eduardo Cruickshank, del Partido Restauración Nacional, al denunciar el engaño con el que se ha intentado seguir calentando los ánimos con la iniciativa para establecer las uniones civiles en lugar del matrimonio igualitario.

Mediante el matrimonio igualitario, las parejas gais tienen los mismos derechos y deberes que los matrimonios entre hombre y mujer. La unión civil, que han intentado promover los fabricistas, corta cantidad de esos derechos.

“Mienten y no les importa polarizar con el engaño”, declaró Cruickshank. Y es que Nueva República, grupo desprendido de Restauración Nacional con Fabricio Alvarado a la cabeza, se alió con legisladores socialcristianos para apoyar las llamadas uniones civiles, cuya inconstitucionalidad es indudable.

No obstante, ese demagógico proyecto puso a Cruickshank y a los demás legisladores de Restauración en un aprieto. Al negarse a participar en la farsa, arriesgaban malas interpretaciones de sus seguidores firmemente opuestos al matrimonio igualitario.

En buena hora la iniciativa fue abandonada por sus proponentes. Representaba un injustificable desperdicio de recursos públicos y revivía artificialmente un punto de discordia, pero el legislador fue más allá en el llamado a la responsabilidad política en la Asamblea Legislativa.

El legislador limonense y sus compañeros de bancada tomaron la decisión de defender el octavo mandamiento y respaldar la verdad por encima de la pose, solo quedaba el camino de la denuncia para dejar claras las razones.

“Algunos, de manera irresponsable y populista, buscando llevar votos a sus filas electorales, le han vendido a la población que esa iniciativa iba a dejar sin efecto lo resuelto por el alto tribunal constitucional, lo cual es absolutamente falso”, afirmó Cruickshank durante una conferencia de prensa convocada para dar sus razones.

Restauración, como Dios manda, se comprometió con el buen funcionamiento de la institucionalidad democrática como pocas fracciones lo han hecho.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.