Los diputados de la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa están a analizando un proyecto de ley que pretende eliminar la contaminación ambiental causada por las colillas de cigarros.
La iniciativa fue propuesta por los legisladores Kattia Rivera, Óscar Izquierdo y Alejandra Larios, todos del Partido Liberación Nacional.
Entre las medidas que propone el texto, están el aumentar los lugares donde se prohíbe fumar, con el fin de evitar que las colillas vayan a parar a ríos o mares.
Actualmente, la ley prohíbe fumar en: establecimientos sanitarios y hospitalarios, centros de trabajo, centros y dependencias de las administraciones públicas y entidades de derecho público, centros educativos públicos y privados, centros de atención social, excepto los espacios abiertos en centros penitenciarios, centros comerciales, casinos, clubes nocturnos, discotecas, bares y restaurantes. Instalaciones deportivas y lugares donde se desarrollen espectáculos y actividades recreativas de cualquier tipo, ascensores, cabinas telefónicas y recintos de los cajeros automáticos y otros espacios de uso público de reducido tamaño.
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También en estaciones de servicio de abastecimiento de combustible y similares, vehículos o medios de transporte remunerado de personas, ambulancias y teleféricos, medios de transporte ferroviarios, marítimos y aeronaves, centros culturales, cines, teatros, salas de lectura, exposiciones, bibliotecas, salas de conferencias, auditorios y museos. Áreas o establecimientos donde se elaboren, transformen, preparen, degusten o vendan alimentos, centros de ocio o esparcimiento para personas menores de edad, puertos y aeropuertos y paradas de buses o taxi.
El nuevo proyecto de ley incluiría a la lista de sitios prohibidos para fumar: playas, ríos, arroyos, quebradas, lagos, lagunas, nacientes, intermitentes, permanentes, humedales, áreas silvestres protegidas en sus terrenos estatales y otros elementos que integren el Patrimonio Natural del Estado.
10 años puede tardar una colilla de cigarro en degradarse.
Ningún país lo ha hecho
La iniciativa que se están analizando pretende declarar las colillas de cigarros como residuos de manejo especial, algo que hasta el momento no se ha hecho en ningún país del mundo.
Y es que, según explicó este martes en una comparecencia Ariel Alfaro Vargas, químico de la Escuela de Biología de la Universidad de Costa Rica, declarar las colillas como residuos de manejo especial es algo que requiere una gran responsabilidad y debe analizarse bien antes de aprobarse, porque exigiría muchos recursos.
Él dijo que primero debería hacerse un plan para establecer cuál sería el proceso que llevarían las colillas, empezando porque no podrían mezclarse con la basura ordinaria, sino que deberían colocarse en recipientes especiales y tratarse de una forma que distinta para evitar el contacto con el ambiente. Después de ahí habría que establecer cuál sería el procedimiento ideal para desecharlas.
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El proyecto también propone hacer responsables a los fabricantes de los cigarros del manejo y desecho de las colillas, pidiéndoles que elaboren un plan de gestión ambiental de esos residuos específicos; sin embargo, el experto y varios diputados coinciden en que el adecuado tratamiento de las colillas debe depender de los consumidores y no de los fabricantes.
En ese último punto, tanto Ariel Alfaro, como los legisladores Manuel Morales, del partido Progreso Social Democrático, Kattia Cambronero, del Liberal Progresista, Daniela Rojas, de la Unidad Social Cristiana y Ariel Robles, del Frente Amplio, dijeron que es fundamental que el proyecto de ley contemple la educación hacia los fumadores para crear conciencia en la importancia de no tirar las colillas al suelo, ya que genera contaminación tanto en la tierra como en el mar, ya que gran parte de ellas se van por las alcantarillas.
75 colillas de cada 100 terminan en el suelo en lugar de un basurero.