Los sacerdotes de la Conferencia Episcopal de Costa Rica se defienden del montón de cosas horribles que están diciendo sobre ellos.
En redes sociales muchas personas están limpiando el piso con los curas, debido a que este jueves dijeron, en una comisión en la Asamblea Legislativa, que no están dispuestos a levantar el secreto de confesión ni aunque se apruebe una ley que se está tramitando, que los obligaría a hacerlo en los casos de abusos y violaciones a menores de edad.
LEA MÁS: Sacerdotes no romperán secreto de confesión aunque se apruebe proyecto de ley ¿por qué?
“La Iglesia católica tiene un compromiso inquebrantable con la protección de la niñez y de las personas más vulnerables, y en ningún momento ha pretendido obstruir la justicia o encubrir delitos de violencia sexual. Sin embargo, también sostenemos con igual firmeza el respeto al sigilo sacramental, el cual es inviolable según las leyes de la Iglesia y la doctrina católica. Este principio, consagrado durante siglos, no se trata de proteger a quien delinque, sino de preservar el carácter sagrado de la confesión como un espacio seguro para el arrepentimiento y el acompañamiento espiritual.
LEA MÁS: Rodrigo Arias mandó un buen filazo a Rodrigo Chaves por la póliza para el Gabinete
“Es incorrecto y engañoso afirmar que los obispos o la Conferencia Episcopal se oponen a la justicia o a la protección de los menores. La Iglesia ha colaborado activamente con las autoridades en la implementación de políticas de prevención y denuncia en casos de abuso, y apoya cualquier medida que, respetando los principios de nuestra fe, ayude a erradicar la violencia sexual y a asistir a las víctimas", informó la iglesia.
Los religiosos dicen, además, que este proyecto de ley, al pretender levantar el sigilo sacramental, no solo amenaza un derecho fundamental de la práctica religiosa, sino que también compromete la esencia misma de la libertad de culto.
Y es que durante la comparecencia de los curas, hasta los diputados los cuestionaron y les dijeron que cómo era posible que prefieran callar ante los casos de abusos, que denunciarlos para evitar más daños a menores.
LEA MÁS: El pueblo opina sobre polémica póliza del Gobierno y respuesta no gustará al gobierno
La diputada Andrea Álvarez, de Liberación Nacional, fue una de las que defendió el proyecto de ley.
“Esto no es contra el secreto de confesión, el cual respeto muchísimo, pero para mí no está por encima el secreto de confesión que protege a las personas vulnerables o con alguna discapacidad”, manifestó la legisladora.
Álvarez dijo que para ella es insuficiente que los curas le recomienden a la gente denunciar lo que les dicen cuando se confiesan, la ley debe ir más allá y convertir la denuncia en una obligación.
La diputada socialcristiana Daniela Rojas también cuestionó a los religiosos y les dijo que no hay mejor manera de honrar a Dios que protegiendo a los más vulnerables y denunciando las injusticias que viven muchos menores.
“Como católica me cuesta mucho entender la posición de dos representantes de la iglesia a la que pertenezco, de estar en contra de este proyecto de ley”, dijo Rojas.