Esta Navidad será muy diferente en San José, ya que las autoridades municipales prohibieron algo que ya era toda una tradición.
El Concejo Municipal de San José aprobó una moción para prohibir que las personas vendan y utilicen pólvora sonora que supere los 85 decibeles (dB) en el cantón capitalino. La iniciativa, respaldada por 11 votos, fue promovida por el regidor Brandon Guadamuz Villalobos, del partido Frente Amplio (FA).
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Para que usted tenga una idea, 85 decibeles es el equivalente al ruido que hace el tren al pasar, o a una sirena del camión de bomberos.
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El texto oficial de la moción llamada “Política de declaratoria de San José como cantón libre del uso de pólvora y pirotecnia sonora y lineamientos técnicos para su implementación”, detalla que la venta y el uso de este tipo de pirotecnia quedaría prohibida en las vías públicas nacionales y cantonales de la ciudad capitalina, así como en aceras, parques, plazas, jardines y todo tipo de patrimonio inmobiliario sobre el cual la Municipalidad y sus dependencias ejerzan dominio, derecho de propiedad, administración o jurisdicción.
La iniciativa también extiende la prohibición a la Municipalidad de San José y todas sus dependencias (comités, concejos y juntas), ya sea por medio de compras o donaciones. Lo mismo ocurrirá para aquellos espectáculos que requieran permisos municipales de uso de espacios públicos, pues solo se permitirá el uso de luces, drones y demás artefactos similares que produzcan ruido inferior a los 85 dB.
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“Esta moción es bastante importante, porque trata de proteger a nuestros seres queridos. Muchos y muchas tenemos mascotas en nuestras casas, perritos y gatos, que durante los momentos en los que se utiliza pólvora con altos decibeles de sonido, se asustan mucho y afecta sus oídos. Esto también afecta a personas con trastorno del espectro autista, mujeres embarazadas, personas adultas mayores y personas con problemas del corazón", explicó el proponente.
Estadio Nacional está libre de la prohibición
Durante su intervención, Guadamuz hizo énfasis en que esta prohibición no aplicará en el Estadio Nacional, localizado en La Sabana, ya que este pertenece al Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (Icoder).
Los demás regidores fueron claros en señalar que será difícil controlar el tema, porque hay mucha pólvora que entra al país y se vende de forma ilegal.
También tocaron el tema de que muchas personas disfrutan la pólvora y que están acostumbrados a comprar en diciembre, pero Guadamuz fue enfático en que no se puede priorizar el entretenimiento al bienestar de las mascotas y animales silvestres que tanto sufren por la pólvora.