Muchas familias aprovechan estos días de fin de año para salir de paseo a las playas o a la montaña, pero entre los trajes de baño, las chancletas y la ropa se les olvida echar algo muy importante: los medicamentos.
“Hombre prevenido vale por dos”, dice el dicho, así que si algún miembro de su familia padece de alguna enfermedad crónica como diabetes o presión alta, que implique la necesidad toma de pastillas diarias o inyectarse insulina, no olvide echar esos medicamentos en la maleta para que el paseo no termine en emergencia.
“Debemos evaluar el tipo de clima que habrá, si hay insectos o si se expondrá a algún animal y qué tipo de alimentación tendrán esos días, eso facilitará hacer una lista de medicamentos para llevar”, explicó la farmacéutica Marcela Leitón.
Si alguno es alérgico a los alimentos o a la picadura de un bicho, eche algún antialérgico. No está de más incluir algo para el dolor en caso de una caída, eso sí, recuerde preguntar, antes de comprarlo, si se puede mezclar con los otros medicamentos que tome la persona con enfermedad crónica, para que no se dé un efecto secundario.
Además de las pastillas, no olvide el bloqueador y el repelente, tanto si va a la playa o a la montaña, en ambos se expone a la radiación solar.
El bloqueador debe ponérselo 30 minutos antes de exponerse al sol.
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