Con estos aguaceros que están cayendo, empiezan a salir los sapos por todo lado y eso representa un gran riesgo para los perros.
A los peluditos les da mucha curiosidad ver un sapo y es común que se acerquen a ellos, los chupen, los muerdan o hasta se los coman. ¡Eso es terrible!
LEA MÁS: Se viene mayo, un mes en el que los perros y gatos corren un gran peligro
Cuando los sapos se sienten en peligro, empiezan a expulsar una especie de sudor lechoso que tiene toxinas venenosas.
LEA MÁS: En la casa también hay que tener un botiquín de primeros auxilios para mascotas
La veterinaria María Antonieta Leandro explica qué podría causarles ese veneno a los perros.
“A veces, los perros chupan el sapo, lo muerden o hasta lo ingieren, eso ya es peor porque el veneno ya está dentro del organismo.
“Ellos empiezan con hipersalivación, muchas veces empiezan con arcadas; las mucosas, como la encía, los ojitos, empiezan a verse cianóticos; o sea, de un color azulado, muchas veces moradito, eso debido a la falta de oxigenación. Luego empiezan con problemas para respirar, muchas veces convulsionan, hay arritmia cardíaca”, contó la veterinaria.
LEA MÁS: Cuando salga a caminar con su peludito respétele su “perronalidad”
La especialista dice que la recomendación siempre es llevar el perro al veterinario para poder frenar los efectos del veneno, ya que en muchos casos pueden ocasionar la muerte del peludito.
“Si uno se da cuenta de que ellos tuvieron contacto con un sapo, hay que llevarlo al veterinario inmediatamente, porque la sintomatología empieza muy rápido. ¿Qué cosas podemos hacer antes de llevarlo si es que se tiene que coordinar el transporte? Lavarles bien la boca, por si acaso solo quedara el tóxico.
“Es importante tener carbón activado en la casa, es bastante bueno y hay diferentes presentaciones, está en pastillas en polvo y se les puede dar con un poquito de agua o con miel de abeja. Eso ayuda a proteger la mucosa del estómago, a secuestrar las toxinas y bacterias del tracto digestivo”, manifestó.
La veterinaria dijo que no es bueno provocarle el vómito al perro porque eso puede causar problemas neurológicos y puede darse una broncoaspiración (que el vómito se vaya al sistema respiratorio), lo que podría complicar aún más el cuadro.