Por medio de un proyecto de ley el diputado Alexander Barrantes pretende prohibir el uso de la pólvora ruidosa en los espectáculos pirotécnicos.
La iniciativa fue presentada por el legislador del partido Progreso Social Democrático este jueves 16 de febrero.
En el documento se detallan las razones por las que se pretende eliminar las bombetas ruidosas, las cuales se basan en efectos nocivos para la salud de personas y animales, así como para el medio ambiente.
Una de las principales razones es el efecto que causa el sonido de las bombetas en las personas autistas, quienes suelen tener hipersensibilidad auditiva. Los ruidos fuertes les afectan más que a cualquier otra persona y pueden causarles un tremendo dolor.
LEA MÁS: Ya hay fecha para la apertura de la segunda estación móvil de Dekra
El proyecto de ley detalla además que estos fuertes sonidos afectan también a los bebés que están en el vientre de la mamá, ya que pueden afectar el desarrollo del oído interno y los órganos sensoriales periféricos: ojos, oídos, nariz, lengua y piel.
Los bebés recién nacidos también pueden verse afectados, los sonidos de este tipo pueden causar pérdida de la audición o disminución de la capacidad auditiva y un efecto emocional como taquicardia, aumento de presión arterial, temor, pánico, llanto, entre otros.
Los animales sufren
También es conocido que los ruidos de la pólvora causa un efecto importante en los animales, situación por la que muchos animalistas se han pronunciado en contra de los espectáculos pirotécnicos.
Cuando los perros escuchan los estallidos de la pólvora, algunos se paralizan o intentan escapar y esconderse. También sufren temblores, salivación excesiva, taquicardia, vocalizaciones intensas y de la llamada postura encogida, en la que flexionan sus extremidades y sus orejas se vuelcan hacia atrás.
LEA MÁS: Conozca las razones por las que la Policía de Tránsito le puede decomisar el vehículo
“El oído del perro tiene más o menos un alcance de entre 10.000 y 50.000 hertzios. Los humanos tenemos un alcance auditivo de hasta 20.000. Ellos pueden escuchar sonidos a una distancia mucho mayor que los humanos”, explica el documento.
Los caballos también pueden verse afectados, ya que son muy sensibles y cualquier cosa inesperada les puede asustar. Sus reacciones de pánico pueden resultar extremadamente dramáticas y peligrosas tanto para ellos como para las personas que los rodean.
El documento señala como otra consecuencia grave que generan los fuegos artificiales es que las aves pueden asustarse tanto que podrían abandonar los nidos y sus crías.
“Para producir pirotecnia se mezclan neutralizantes, oxidantes y aglomerantes, además del perclorato de sodio que da propulsión al cohete, los metales pesados que aportan el color y los aerosoles que producen la detonación. Estos compuestos liberan una lluvia de toxinas al suelo, aire y agua tanto en su producción como en su detonación. Cuando son elaborados, se mezclan elementos químicos como nitrato de potasio, nitrato de sodio, azufre y carbón, lo que provoca contaminación en el agua usada”, detalla en el proyecto de ley.
LEA MÁS: MOPT mejora demarcación en escuelas cercanas a carreteras con alto tránsito
Sonidos dañinos
La intensidad del sonido se mide en decibeles (dB). Para que haya ambientes saludables desde el punto de vista acústico, no se deben sobrepasar los 55 dB.
Para tener un mejor entendimiento de los decibeles, el documento da ejemplos de algunas situaciones y su medición en decibeles: un susurro equivale a 10 dB; el oleaje suave de la playa a 30dB, una conversación normal puede darse a 50 dB, una conversación a gritos a 70 dB. La música de una banda de rock puede alcanzar los 100 dB, un cohete espacial puede generar 180 dB.
Los fuegos artificiales pueden generar intensidad sonora que varía entre los 110 y hasta 190 dB, dependiendo del tipo de los artefactos utilizados y la distancia a la que nos encontramos. La OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda que los niños no se expongan jamás a sonidos mayores a 140 dB.
“Únicamente se permitirá en el país el uso de pólvora no ruidosa por parte de las empresas dedicadas a los espectáculos pirotécnicos cuyas condiciones y requisitos están reguladas por la Ley N.° 7530, Ley de Armas y Explosivos y sus reformas, así como su reglamento”, dice el proyecto de ley.
No existe la pólvora sin sonido
Dagoberto Calvo, de la empresa Fuegos Artificiales Internacionales Custodio Calvo SA (Faisa), leyó el proyecto de ley presentado por el diputado y dice que la verdad no le ve mucho futuro.
“Me parece poco o nada adaptado a la realidad de Costa Rica y de nuestra legislación. Es imposible hacer un espectáculo pirotécnico con pólvora no sonora, no existen.
“Existen las leyes en Costa Rica y reglamentos que exigen el retiro a distancias específicas para que el ruido no genere una afectación, también existen recintos, privados en su mayoría a los cuales asisten las personas conscientes de que existirá pirotecnia y lo hacen bajo su propia decisión, por cuanto no les afecta el ruido y porque la actividad así mismo, en cumplimiento con las leyes nacionales, garantiza los distanciamientos para quienes sí sufren de esta afectación.
“A nadie se le obliga a participar de un evento al cual no quiere asistir, así como tampoco se permite realizar espectáculos pirotécnicos en vía publica sin que se garantice primero la salud de la población, lo correcto es que se lleven a cabo en sitios que cuentan con la verificación por parte de las autoridades como el Ministerio de Salud, Ministerio de Seguridad y el Cuerpo Bomberos”, explicó el empresario.