Desde hace seis meses, en la casa de Araminta Astúa dejaron de tirar a la basura las cáscaras de frutas, de huevo, verduras, sobrantes de arroz y en su lugar, echan estos desechos en una máquina de compostaje, es decir, una máquina que convierte en abono los desechos orgánicos.

Astúa manifestó que obtuvo el aparato gracias a una donación de la Municipalidad de Desamparados, que además la capacitó para el adecuado manejo de la máquina.

“Un conocido nos consultó si estábamos interesados en trabajar con las máquinas y acepté encantada, porque hace meses sacaba una gran cantidad de desechos para mandarlos al relleno sanitario y gracias a la máquina de compostaje, la cantidad de basura que saco en la actualidad es mucho menor y además, el abono que producimos lo aprovechamos en casa”, expresó.

“La máquina tiene dos espacios. Cuando uno se llena lo dejamos que vaya procesando esos alimentos, para que se conviertan en abono y empezamos a llenar el segundo. Todos los días podemos depositar desechos, solamente debemos tener cuidado de no mojar la máquina y tenemos que darle vuelta 3 veces al día, para que los desechos se procesen adecuadamente”, manifestó doña Araminta.

Así como ella, otras 3.000 familias del cantón central Heredia, Desamparados, Curridabat, Alajuela centro y Montes de Oca le sacan el jugo a los desechos orgánicos gracias a un convenio que firman con los gobiernos locales, que les dona la máquina para crear abono. Próximamente se unirán los cantones de Tibás, San Pablo, en Heredia y Bagaces, en Guanacaste.

Devolver a la tierra...

La empresa 360 Soluciones Verdes es la que trabaja con las munis en estas campañas para las familias desde el 2017.

“Las municipalidades se encargan de convocar a las familias interesadas y estas deben presentar una serie de requisitos (que varían según el gobierno local). Luego se inicia con el proceso de capacitación y una vez que lo completan, se les entrega la máquina sin ningún costo y se vigila que las usen adecuadamente”, manifestó Vinicio Arias, socio de 360 Soluciones Verdes.

Arias manifestó que capacitan a las familias sobre el correcto uso de la máquina, pero en especial hacen énfasis en la importancia de evitar el desperdicio de alimentos.

“Muchas veces es inevitable no desperdiciar los alimentos, pero con la máquina de compostaje ayudamos a que esos alimentos de una forma regresen a la tierra. Nos alegra observar comentarios en redes sociales y de las mismas familias, donde manifiestan que gracias al uso de la máquina se han cambiado los hábitos para bien”, añadió.

Munis apuntadas

El año pasado, la Municipalidad de Desamparados inició con la entrega de máquinas de compostaje y al día de hoy, 500 familias cuentan con este aparato.

“Comenzamos entregando 200 máquinas y conforme pasó el tiempo más familias se interesaron en tener una para sus viviendas. Y es que la mayoría de los desechos que lanzamos en nuestras casas son orgánicos y muchos de ellos son alimentos que se dañaron”, expresó Evelyn Hernández, coordinadora de Saneamiento Ambiental de la municipalidad desamparadeña.

Hernández agregó que en la actualidad, 25 familias están capacitándose para desarrollar huertas comunitarias para que los vecinos puedan producir sus propios cultivos.

“Algunas familias venden bolsitas con abono y es una entradita extra de dinero. A través de grupos de whatsapp damos seguimiento a cada familia y solamente 4 familias nos han devuelto la máquina debido a que no pudieron continuar con el programa”, añadió.

La Municipalidad de Montes de Oca se incorporó hace unos dos meses al programa y en la actualidad, 90 familias cuentan con la máquina de compostaje.

Marcel Soler, alcalde de Montes de Oca, expresó que más de 450 familias de todo el cantón se mostraron interesadas en el verde proyecto.

"En esta primera compra de las máquinas invertimos ¢10 millones. Esperamos que el Concejo Municipal nos apruebe un cambio en el presupuesto y en el 2020 esperamos comprar otras 90 máquinas.

“El gran interés de las personas nos refuerza la idea de que las personas del cantón están dispuestas a cambiar la forma de manejar los residuos. Hay una conciencia por conservar el ambiente”, comentó Soler.

El alcalde agregó que para el próximo año desean dar máquinas a restaurantes o a edificios de condominios, para que puedan manejar los residuos como comunidad.

“Esto es una relación ganar - ganar, porque nosotros como municipalidad nos aseguramos que menos desechos se envían a los rellenos sanitarios y las familias aprenden a hacer un mejor uso de sus residuos”, destacó.