EscucharA Jonathan González Carvajal, de 32 años, le quitaron la vida, con la trampa de la negociación de un carro que nunca existió y los delincuentes solo querían el dinero en efectivo que llevaban.
Frijol, como le decían de cariño, ni siquiera fue el negociante, él acompañaba al supuesto comprador y a la familia de este, pues lo habían contratado por ser mecánico e iba a revisar el carro.
Esa es la versión que manejan las autoridades judiciales, sobre este atroz hecho que fue reportado a las 8:24 p. m., de este miércoles 30 de abril, en urbanización Atardecer, en Quircot, en San Nicolás de Cartago.
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Jonathan y los que iban a comprar el carro, habían salido desde Nuevo Arenal de Tilarán, Guanacaste, y debían llegar a Cartago, donde habían negociado dejar el vehículo en el que iban por uno más moderno y dar un vuelto de ¢2 millones.
Ese dinero lo llevaban en efectivo y los maleantes que hicieron el contacto, lo sabían.
La plata era lo único que les interesaba, al final tampoco lo lograron robar.
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De acuerdo con la información judicial confirmada a La Teja, Jonathan manejaba el carro y lo acompañaban dos hombres y una mujer (los que iban a comprar el carro), cuando estaban llegando les hicieron parada y les preguntaron que si eran los que iban por la negociación de vehículo, sin ningún temor respondieron que sí; los maleantes dieron media vuelta y con pasamontañas los atacaron.
Las víctimas intentaron huir para salvarse, pero Jonathan ya estaba mal herido en el pecho y falleció.
El OIJ de momento no tiene detenidos por este cruel hecho.
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Luis Arturo González, papá del fallecido, confirmó que su hijo trabajaba como mecánico y revisaba carros antes de que los clientes los compraran.
“Él era una buena persona, un hombre de familia, entregado a sus hijas, le gustaba andar en moto y endurar (actividad deportiva en moto), no tenía problemas”, recordó el papá.
Las autoridades confirmaron que no tenía antecedentes judiciales.
Este viernes 2 de mayo lo sepultarán en Tilarán.
