Por cosas del destino, un agente del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) evitó que el robo de una jacket de una tienda terminara por convertirse en el homicidio del administrador de dicho negocio.
El agente judicial tuvo un papel clave en ese caso, pues detuvo a un hombre apellidado Novoa, quien estaba tratando de quitarle la vida a aun hombre de apellido Valladares, quien lo había perseguido para quitarle la prenda que se había llevado del local comercial.
Por ese hecho Novoa recibió un fuerte castigo, pues el Tribunal Penal de Flagrancia del Segundo Circuito Judicial de San José lo condenó a 9 años de prisión por los delitos de robo simple con fuerza sobre las cosas y tentativa de homicidio.
Los hechos ocurrieron la tarde del pasado 3 de febrero en un centro comercial en Curridabat, específicamente en la tienda en la que Valladares trabajaba como administrador.
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“Supuestamente, al sitio se presentó el imputado, quien con la finalidad de apoderarse ilegítimamente de bienes ajenos y utilizando fuerza sobre las cosas, arrancó e inutilizó un dispositivo electrónico de seguridad colocado en una jacket, que introdujo dentro de su pantalón; una vez con el bien en su poder, se retiró del local comercial”, informó el Poder Judicial.
Al parecer, Valladares se dio cuenta de lo que había pasado y le dio persecución al sujeto hasta que logró alcanzarlo, en ese momento se dio un forcejeo entre ambos.
“Aparentemente, Novoa tomó del cuello al ofendido aplicando una llave sobre el mismo, ejerciendo una presión fuerte, en la cual el ofendido perdió el conocimiento y se desmayó”.
Fue ahí cuando por cosas del destino apareció el agente del OIJ, quien intervino para detener a Novoa.
“En ese mismo momento un ciudadano de identidad desconocida entregó una prenda de vestir tipo jacket, la cual ubicó en vía pública a escasos metros del lugar de los hechos”, agregó el Poder Judicial.