Una despedida corta, pero con mucho amor, así fue como este martes sus amigos dieron el último adiós a Jesús López Ortiz, de 29 años, el joven que murió este sábado 29 de julio cuando fue atacado por un cocodrilo en Río Cañas de Santa Cruz, en Guanacaste.
Globos y camisetas blancas, sus amigos con camisetas de fútbol, sus compañeros del equipo en que jugaba, el Río Cañas, y hasta una cimarrona escoltaron la llegada de Chucho, como le decían de cariño.
Su hermana María Jesús López nos contó que para ellos cómo familia fue muy bella la despedida que le dieron.
Mientras que Luis Montes, entrenador del equipo Río Cañas, aseguró que nunca antes en el pueblo han tenido un funeral con tanta gente. Afirmó que lo que les faltó fue tiempo para poder estar un ratito más con él.
María Jesús recordó que les indicaron que solo podían estar media hora con él y debían enterrarlo este mismo martes, situación que les duele mucho pues tenían la esperanza de poder velarlo, pero con tanto atraso, fue imposible.
Jesús jugaba en el equipo de Río Cañas y era el peluquero a domicilio del pueblo.
En un rancho en la plaza de Deportes le harán una oración. Ese sitio era uno de sus lugares favoritos, donde jugaba con sus compas.
Jesús fue sepultado en el cementerio Río Cañas Nuevo.
Él deja a su esposa y dos hijos, de 2 y 10 años. Además a su madre, quien aseguró tiene un dolor inmenso en su corazón.
Si usted quiere ayudar a la familia puede hacer un Sinpe móvil al teléfono 6327-6230 a nombre de María Jesús López, hermana de Chucho.