Jason Andrés Alvarado Sánchez, el bombero voluntario de 27 años que perdió la vida de forma trágica mientras participaba con varios de sus compañeros en una práctica de rescate acuático, fue despedido este martes 31 de octubre.
Un montón de bomberos de todo el país llegaron a apoyar a la familia de Jason y a sus compañeros de la estación de Pital.
La despedida se realizó en la iglesia y el cementerio de Santa Rosa de La Palmera, en San Carlos.
“Un compañero que perdió su vida en el cumplimiento de su deber, en un entrenamiento para aprender a salvar vidas, a todos nos embarga de mucho dolor, hemos venido bomberos de todo el país, venimos a acompañarlos en su momento de dolor, a decirles a sus compañeros de la estación de Pital que aquí estamos, a un compañero que hoy pasa a la estación del cielo”, dijo Héctor Chaves, director nacional de Bomberos
Durante la despedida, Jason fue ascendido a cabo, él soñaba con pronto poder entrar a esa institución como trabajador regular.
La tragedia ocurrió en San Rafael de La Palmera, en San Carlos. En la práctica, Jason quedó sumergido y pese a que sus compañeros lo sacaron y le dieron maniobras de resucitación, él falleció.
El joven tenía aproximadamente dos años y medio de formar parte de dicha institución como bombero voluntario, además era vecino de esa misma localidad de La Palmera y deja dos gemelitas de cuatro añitos.