EscucharCosta Rica se convirtió en un narcoestado y cada día surgen más evidencias de cómo estas agrupaciones tienen tentáculos en las instituciones del Gobierno.
El hecho más reciente fue descubierto este miércoles 18 de diciembre en la serie de allanamientos judiciales en los que detuvieron a cuatro oficiales de la Fuerza Pública y una técnica judicial sospechosos de ayudar a una banda dedica a vender drogas en Aserrí y Acosta, dicho grupo criminal está siendo investigado también por préstamos, gota a gota y tres homicidios.
Álvaro Ramos, experto en Seguridad, afirma que la seguridad nacional y la perspectiva del narcotráfico son los temas más importantes que se deben abarcar.
“El narcoestado que se ha apoderado del país, podemos observar que tiene ramificaciones peligrosísimas en funcionarios públicos, una funcionaria de la DIS, hace 15 días un exfuncionario de la Presidencia tuvimos noticias que fue víctima de un ataque de parte del narcotráfico, esto indica que está profundamente penetrado a ese nivel”, señaló Ramos.
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El experto agregó que lo que realmente debe importarle a la población, al Gobierno y a todas las policías es la seguridad ciudadana, esta es la que se ha perdido totalmente.
“La sensación extrema de inseguridad que se muestra en todas las encuestas, que tienen que ver con corrupción, seguridad, narcotráfico se acerca al 80% y en este sentido no se está haciendo nada”.
“Esta es la esencia de gobernar, nosotros no gobernamos en visión de los grandes narcotraficantes, gobernamos en visión de los cinco millones de costarricenses y extranjeros que viven en Costa Rica tengan una calidad de vida y un mínimo decente de seguridad” señaló Ramos.
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Banda narco de Renco operaba en colegios
Durante los operativos de este miércoles el OIJ capturó al líder de una banda, un hombre de apellido Ramírez, conocido como el Renco, el segundo a cargo es de apellido Chaves.
Los 24 allanamientos se realizaron en Acosta, Aserrí y Alajuelita. Los investigadores también cayeron en las Delegaciones de la Policía Administrativa de Acosta y Aserrí, y al escritorio de la funcionaria del Primer Circuito Judicial en San José de apellido Valverde.
Michael Soto, subdirector del OIJ, explicó que la banda se dedicaba a vender droga en las afueras de los colegios de Aserrí y Acosta, los sospechosos interceptaban a los estudiantes a la salida de clases para ofrecerles las drogas.
Los sospechosos tenían control absoluto de las ventas de cocaína y droga en ambas comunidades.
Los policías, aparentemente, ayudaban a los sospechosos para evitar que fueran detenidos, mientras que la funcionaria judicial los ayudaba, supuestamente, en el tema de legitimación de capitales, los detenidos tenían una zapatería y una barbería para esos fines.
Además, Soto aseguró que están ligados a préstamos gota a gota.
“Eran los que tenían el control de las ventas de droga en la zona, en lo que se conoce como narcomenudeo. Ellos se dedicaban a la venta en la zona, tenían cuatro puntos, así como las ventas exprés. Es importante recalcar que el grupo está ligado con los préstamos gota a gota en el sector, producto de las ganancias del narcotráfico los colocaban y, además, a las peleas ilegales de gallos en las que se hacían apuestas y transacciones de dinero”, dijo Soto.
A la banda se le vincula con tres homicidios, dos ocurridos el 21 de noviembre del 2023, en La Fila del Rosario en Aserrí. Ese día fueron asesinados una menor de edad de 17 años y un hombre de 26 años de apellido Peraza.
El otro ocurrió el 18 de junio del presente año, en Vuelta de Jorco en Aserrí, siendo el fallecido un muchachito de 16 años.
Los sospechosos serán puestos a la orden del Ministerio Público.
Marlon Cubillo, director General de la Fuerza Pública, informó que la Policía tiene cero tolerancia en estos casos y que ellos ya ordenaron una investigación administrativa contra los sospechosos.
