La familia de Daniela Escobar Salas, la joven de 30 años que está desaparecida desde el 15 de octubre, se refirió al hallazgo realizado por las autoridades este miércoles, cuando en la zona de búsqueda, en altamar, encontraron unos restos que podrían ser humanos.
Víctor Escobar, hermano de Daniela, confirmó a La Teja que oficiales del Servicio Nacional de Guardacostas encontraron a 15 millas de la orilla, en Sámara, lo que en apariencia eran unos huesos.
“Respecto al hallazgo que hicieron los guardacostas es como un tejido (piel) con unos restos óseos, que fueron enviados a análisis forense, porque es prematuro indicar si corresponden a restos humanos o de algún animal, porque ni eso se podía distinguir. De eso sí tenemos que esperar el resultado del análisis”, dijo.
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Escobar añadió que aunque aún hace falta la prueba forense, su familia tiene toda la esperanza de que no se traten de restos humanos, sobre todo porque pescadores de la zona les dijeron que ahí no hay cocodrilos, como para pensar que eso fue lo que quedó tras un ataque.
Mientras que el OIJ indicó a este medio que de momento tampoco es posible confirmar si lo hallado fueron restos humanos.
“Ayer personal de Guardacostas ubicó en altamar en la zona de Samara unos restos que al parecer podrían ser humanos, por lo que el OIJ de Nicoya los remitió a la Sección de Patología Forense en San Joaquín de Flores, para confirmar o descartar que se traten de restos humanos”, señaló el OIJ.
Víctor mencionó que este jueves continuarán con la búsqueda de su hermano, centrándose en un rastreo por tierra, en el que contarán con ayuda de una brigada especializada.
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“Estamos a la espera de una brigada de búsqueda amplia que viene desde Pérez Zeledón con unidad canina, que llegaría esta misma mañana”, añadió.
A la joven la vieron por última vez la noche del martes 15 de octubre anterior y desde entonces su paradero es incierto.
Ese día, Daniela estuvo en un karaoke en un bar-restaurante en Sámara, Guanacaste. Al parecer, a ella la vieron en medio de una discusión con un hombre. Posteriormente, la muchacha se apartó y luego la vieron salir sola del local; sin embargo, nunca llegó a la casa.
Daniela vestía una enagua de mezclilla, un top verde musgo y un chaleco blanco.