Tres taxistas informales de Puriscal de apellidos Rojas, de 24 años; Morales, de 31 y Alvarado, de 43 años, fueron detenidos como sospechosos de amenazar a un oficial de Tránsito de apellido Bonilla.
Los piratas fueron capturados la tarde de este jueves 6 de agosto en el centro del cantón josefino por el delito de amenazas a funcionario público.
Bonilla presentó la denuncia el jueves 4 de agosto pasado en la delegación de Puriscal.
Según el uniformado, las amenazas en su contra empezaron a darse por medio de diferentes redes sociales, pero la gota que derramó el vaso por una serie de audios que recibió en WhatsApp, en los que se hablaban de un supuesto plan para sacarlo de Puriscal por las malas.
Trascendió que en uno de los audios, que se hicieron virales en el cantón, se mencionaba la contratación de un sujeto, vecino de Pavas, quien, supuestamente, iba a buscar a Bonilla para darle una golpiza o hacerle daño con un arma de fuego.
El uniformado le explicó a las autoridades judiciales que también estaba muy preocupado por la seguridad de sus seres queridos, pues se difundió información sensible sobre él, como la dirección de su casa y la hora a la que salía de trabajar.
La Policía Judicial no dio mayores detalles sobre el motivo que habría dado pie a las amenazas, pero una fuente cercana al caso aseguró que todo se debe a la labor de Bonilla como tráfico.
Según el artículo 316 del Código Penal, por el delito de amenazas a funcionario público, los sospechosos se exponen a un castigo que va de un mes a dos años de prisión.