Las drogas sintéticas como la “droga caníbal” y otra sustancia conocida como “Frankenstein”, por mencionar algunas, han empezado a ganar terreno en nuestro país, situación que tiene en alerta a las autoridades.
Así lo explicó Esteban Chavarría Araya, fiscal de la Jurisdicción Especializada en Delincuencia Organizada (JEDO), en el programa de radio Frecuencia MP, señalando que estas sustancias se abren espacio en el mercado del país gracias a sus fuertes efectos y alto potencial adictivo.
“Son desarrolladas en laboratorios y llegan a simular los componentes químicos de las drogas naturales, con la diferencia de que su producción se da en ambientes controlados”, Chavarría.
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El fiscal señaló que entre las drogas sintéticas más populares en el país se encuentran el fentanilo; el nitazeno, conocido como droga “Frankenstein”; el LSD; MDMA o éxtasis; ketamina; y MPDV, también llamada droga caníbal.
A diferencia de drogas que podrían ser calificadas como tradicionales, tales como marihuana, cocaína y crack, la peligrosidad de estas nuevas sustancias se ve potenciada por sus fuertes efectos.
“La sensación que producen estas drogas se va multiplicando y eso hace que el cuerpo requiera más de esa sustancia, lo que las hace altamente adictivas. La droga caníbal, por ejemplo, produce una sensación de euforia que se multiplica hasta ser 800 veces más adictiva que el fentanilo”, explicó Chavarría.
Según el fiscal, si la persona que consume estas sustancias tiene alguna patología o adicción previa, puede provocar sensaciones de euforia, depresión y alucinaciones.
“Se han dado casos, en España, en que se da tal euforia que la persona requiere automutilarse o mutilar a otras personas”, agregó.
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Vienen de Europa
El fiscal explicó que aunque la presencia de estas drogas sintéticas ha aumentado en el país, hasta el momento no se ha detectado ningún laboratorio, es decir, se trata de un “producto” de importación.
“Estas sustancias ingresan a Costa Rica desde países europeos, como Francia, Holanda e Inglaterra, por medio de paquetería, es decir, envíos postales que se intentan ocultar en cajas con mecanismos como dobles forros”, explicó Chavarría.
Chavarría también mencionó que estas drogas han ganado espacio en el mercado debido a que están dirigidas a un público diferente al que apuntan las drogas tradicionales, pues las sustancias sintéticas son muy apetecidas por jóvenes con cierta capacidad adquisitiva.
“También suelen encontrarse en contextos particulares, como fiestas o eventos musicales, mayormente en la Gran Área Metropolitana y en zonas costeras de atractivo turístico”.