“Gracias a Dios Bismarck mintió porque esa mentira fue la que encausa la investigación”.
Esa fue una de las frases que dio en sus conclusiones el fiscal Ricky González, cuando solicitó la condena máxima de 18 años de cárcel en contra de Bismarck Martínez por el homicidio de la turista Carla Stefaniak, ocurrido el 28 de noviembre de 2018.
González explicó que el Ministerio Público no tiene ni la más mínima duda de que fue Bismarck quien mató a la joven, esto debido a que él montó una supuesta red de mentiras para encubrirse.
LEA MÁS: Sospechoso de asesinar a Carla Stefaniak habría planeado huir
Según el fiscal, la mentira que habría inventado Martínez al decir que Stefaniak se fue de Villas LeMas, en Escazú, en un carro misterioso solo sirvió para ponerlo en la mira de las autoridades.
“Empieza a desvariar en su versión de manera tal que de alguna forma llega a señalarse como imputado en la investigación”, indicó González.
Cortesía lo delató
Además de las pruebas y testimonios presentados a lo largo del debate, el fiscal dijo que hubo un aspecto que, en su opinión, delató a Martínez y es el hecho de que siempre fue considerado como un hombre muy amable y cortés, hasta el día del crimen.
Según González, los dueños de Villas LeMas dijeron que todos amaban a Bismarck, incluso en las reseñas del hotel otros huéspedes habían calificado al guarda como una persona muy atenta.
“Genera una gran duda algo que él dice y es que doña Carla, siendo él tan amable, sale de su habitación, baja una cuesta, sale del portón de la villa y carga ella misma todas las maletas al carro y él no le ayuda, no hace más que abrir el portón, cuando él había sido una persona amable”, destacó.
LEA MÁS: Carla Stefaniak: Carretillo y lona para mover el cadáver
Inhumano
No solo ese cambio de actitud delató a Martínez, también lo hizo una frase que aparentemente salió de su boca cuando la familia de Stefaniak conversaba con los dueños del hotel y aún no se había descubierto el homicidio.
"De manera sorpresiva y sin que nadie se lo pregunte, (Bismarck) le dice a la familia de Carla: ‘yo fui el último en verla con vida’, es decir, nadie le preguntó eso, nadie podía asegurar que Carla estuviera muerta en ese momento, solo Bismarck porque él la había matado”, aseguró González.
El fiscal pidió la pena máxima de 18 años por homicidio simple, asegurando que Martínez merecía el castigo más severo por las supuestas mentiras que dio para tapar la muerte de la extranjera.
El Ministerio Público indicó que no pudo pedir más años de prisión debido a que no se recalificó el delito a homicidio calificado, esto debido a que no había suficientes pruebas.