La última acción en vida de Alexander Fernando Roldán Rivera, de 43 años, fue intentar salvar de la muerte a su exsuegro Freddy Solano Ramírez, de 74 años.
Esta heroica acción le costó su vida, dejando un gran vacío para sus allegados, pero quedaron con la satisfacción de saber que Alexander siempre, hasta en su última acción, mostró su esencia de servir a los demás.
Alexander no dudó en bajar a un tanque que, en apariencia, funcionó como un pozo, luego de ver que su exsuegro estaba adentro; sin embargo el oxígeno les pasó una mala jugada y acabó con la vida de ambos.
Alex Gómez aún le parece mentira que su amigo Alexander ya no esté, no obstante, trae a su memoria lo servicial que fue y eso es lo que lo hace recordarlo con mucho cariño.
“Teníamos casi que toda la vida de ser amigos, nos conocimos cuando teníamos siete años, él llegó a vivir cerca de mi casa y nos hicimos amigos, hasta el sábado que dejó de estar con nosotros.
“Alex era una persona amable, servicial, ayudaba a quien fuera sin recibir nada a cambio, era una persona de un corazón grande, noble. Sencillo y siempre tenía palabras de aliento, al final terminaba con un: ‘Dios te bendiga’ o ‘Dios te acompañe”, recordó Gómez.
De cariño, estos amigos se llamaban Ti, también Alexander acostumbraba a llamar a sus allegados como ‘Galáctico’, son las palabras que más recuerdan sus allegados.
“Recuerdo cuando me dio covid y le dije: ‘Ti, tengo covid’ y a los diez minutos estaba con un diario en mi casa sin pedirle nada”, esas eran sus acciones, ser noble y darse por los demás.
La última vez que Alex contactó a Alexander fue hace una semana cuando lo llamó y Alexander le respondió “Ti, ya te llamo, tengo que hablar con vos”, sin embargo, esa llamada nunca llegó y siempre quedará la incertidumbre de qué era lo que quería decirle.
Alexander sufrió el mortal accidente el sábado 19 de febrero anterior en San Nicolás de Cartago.
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Fatalidad
La tragedia ocurrió cuando Alexander estaba junto a su exsuegro y otro hombre en una bodega donde, al parecer, haría unos trabajos de electricidad, profesión a la que se dedicaba.
De acuerdo con los investigadores, el tanque tenía una tapa encima, pero en determinado momento Alexander y el otro hombre se dieron cuenta que don Freddy no estaba y al prestar atención vieron que la tapa del tanque estaba abierta.
“Al asomarse ven que el señor Freddy estaba dentro de ese tanque. Alexander ingresó para tratar de ayudarlo, pero en ese momento también se desvaneció y quedó desmayado dentro del tanque”, detalló el OIJ.
Alexander dejó una hija de 18 años, quien también era nieta de don Freddy.
Los amigos de Alexander le cumplieron su último deseo de que en su funeral fuera despedido con una grúa y una caravana, así lo hicieron este lunes 21 de febrero cuando lo sepultaron en el cementerio de San Rafael de Oreamuno de Cartago, a las 9 a. m.
Ese mismo día, a la 1 p. m., los lugareños despidieron a don Freddy en el mismo cementerio.
“Fue un ser querido por todo el pueblo”, mencionó Alex.