Gerardo Hernández, de 64 años, era un guarda de seguridad bastante querido en Turrialba, de donde era oriundo.
A él le quitaron la vida tras ser golpeado por una piedra en San Rafael de La Unión, en Cartago.
El más preciado legado que dejó don Gerardo fueron sus cuatro hijos, tres de ellos mayores de edad y uno que es un adolescente, según se detalla en el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
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En noviembre próximo iba a cumplir sus 65 años y, al parecer, estaba cerca de su pensión.
“Deja una huella imborrable en quienes tuvimos el honor de conocerlo y compartir con él. Su compromiso, responsabilidad y compañerismo fueron ejemplo para todos”, comentaron en las redes sociales de una empresa de seguridad y limpieza.
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La víctima sufrió la agresión este domingo 8 de junio, a las 9:35 a.m.
“Hernández iba caminando en compañía de un hombre cuando, después de una aparente discusión, este lo golpea con una piedra en la cabeza”, señalaron en el OIJ.
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La víctima fue llevada al hospital Maximiliano Peralta de Cartago, donde falleció.
Un sujeto de apellido Alpízar, de 20 años, está en manos de las autoridades por ser sospechoso de este homicidio.