En medio del dolor que significa despedir a un ser querido, la esposa y la familia de Minor Pérez aseguran estar en paz.
Este miércoles en la mañana fue el funeral del operario fallecido el lunes en el Hospital México luego de haber estado atrapado 20 horas en un derrumbe y haber perdido las piernas.
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El funeral se llevó a cabo a las 11 de la mañana en el templo católico del barrio San José de Alajuela y fue presidido por el obispo Ángel San Casimiro.
En la ceremonia el religioso destacó la fortaleza que han mostrado la esposa y los familiares de don Minor. Según contó el obispo, él ha estado en contacto con los allegados al trabajador y ellos aseguran que sienten la presencia de Dios en sus corazones y en sus hogares.
La iglesia del barrio San José se hizo pequeña para la gran cantidad de personas que llegaron a despedir a Minor.
El párroco del barrio San José, de apellido Solís, también dio un mensaje de solidaridad a los dolientes y rescató la unión que tuvieron los cuerpos de socorro en el rescate de Minor, hecho en el que mostraron un gran espíritu de humanismo y solidaridad.
Alberto Arroyo, suegro del fallecido, agradeció a las personas que les han dado palabras de aliento y también a quienes asistieron al funeral.
“La labor que hicieron los cruzrojistas y lo bomberos fue muy buena. También los médicos hicieron un gran trabajo y estamos muy agradecidos por eso”, dijo Arroyo, quien llegó el lunes de Estados Unidos.
Los compañeros de trabajo de Minor también fueron a la despedida. Llevaron puesto un lazo negro en señal de luto.
Terraplén sorpresivo
El accidente que causó la muerte de Pérez se dio el viernes pasado a las 3:56 de la tarde en el tajo El Cerro, en La Garita de Alajuela.
Él estaba operando una retroexcavadora y un derrumbe lo dejó sepultado con todo y la maquinaria.
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Luego de una enorme operativo de rescate, Minor fue liberado y llevado al hospital; sin embargo, las lesiones por el aplastamiento que sufrió le causaron la muerte el lunes pasado. Un día antes habían tenido que amputarle las piernas.
El operario tenía 49 años, era casado y tenía tres hijos.