Un policía penitenciario, que tenía más de 10 años de laborar para dicho cuerpo policial, pasó una terrible vergüenza a manos de sus compañeros, no por un hecho jocoso sino por un acto que lo metió en una tremenda bronca.
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El Ministerio de Justicia informó que se trata de un uniformado apellidado Rojas Portilla, quien la noche del jueves fue sorprendido cuando llevaba escondido un envoltorio con varias drogas y otros artefactos.
“Los hechos se dieron en la cárcel de San Sebastián cuando, al realizar la revisión corporal del oficial y la de sus pertenencias, se ubicó un paquete envuelto en tape negro que contenía 91 gramos de cocaína, 66 gramos de marihuana, 2,10 gramos de droga wax, un teléfono celular y un cargador”, detalló Justicia.
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De inmediato, los compañeros de Rojas realizaron las coordinaciones correspondientes con la Fiscalía de Flagrancia del Primer Circuito Judicial de San José para el traslado del agente.
“Estas acciones, reflejan el compromiso de la institución de mantener el control dentro de los centros penitenciarios, donde nuestro trabajo y la consigna de cero tolerancia son aplicados de manera contundente a privados de libertad, así como a funcionarios”, destacó Justicia.
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Durante esta administración, un total de 30 funcionarios han sido trasladados al Ministerio Público por actos de ese tipo.