San Isidro de Heredia amaneció de luto este domingo por la trágica muerte de uno de sus personajes más queridos: don Rafael Orozco Zúñiga, de 70 años y a quien conocían de cariño como “Chaquelo”.

Don Rafael perdió la vida la noche de este sábado 28 de agosto al ser atropellado por un ingrato conductor que se dio a la fuga como si nada hubiera pasado. El incidente ocurrió en el centro de esa comunidad herediana, en las inmediaciones del negocio Foto González.

LEA MÁS: Muere atropellado adulto mayor que cambiaba llanta de su carro

El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó que la tragedia se dio cuando Orozco estaba haciéndole una reparación a su carro.

“La versión preliminar es que él se encontraba sobre la vía pública cambiándole una llanta a su carro, momento en el que pasó otro vehículo que se dio a la fuga luego de atropellarlo. El señor falleció en el lugar”, explicó la Policía Judicial.

Con el corazón hecho un puño

Decenas de vecinos de San Isidro están con el corazón hecho un puño ante esta triste noticia, pues don Rafael, quien actualmente se ganaba la vida como taxista informal, era una persona muy querida, tanto por su forma de ser como por su trato tan servicial.

La municipalidad de la localidad se unió a los mensajes de apoyo enviados a la familia de Orozco.

“La Municipalidad de San Isidro lamenta el sensible fallecimiento del isidreño Rafael Orozco Zúñiga. Él fue síndico municipal en el periodo de 1998 al 2002 y actualmente era miembro de la junta administrativa del cementerio Municipal. Nos unimos al dolor de sus familiares y amigos”, publicó la muni en su Facebook.

El OIJ también aseguró que los investigadores encargados del caso están realizando diligencias para encontrar el carro involucrado en el accidente y a la persona que lo iba manejando.

“Agradecerles a todas las personas que de una u otra forma se han solidarizado con nosotros”.

—  Rafael Orozco Villalobos, hijo de don Rafa.

Un enorme corazón

Rafael Orozco Villalobos, hijo de don Rafa, recordó a su papá como un hombre sencillo, amable y humilde, que no lo pensaba dos veces para quitarse el bocado de la boca y dárselo a quien lo necesitara.

“Era un pirata que hasta le daba fiado a la gente, lo llamaban y le decían que si les podía hacer un viaje y que luego se lo pagaban porque no tenían plata, y ahí iba él, no le importaba no tener plata, lo que le interesaba era ayudar”, dijo.

Orozco contó que su papá tenía más de 14 años de trabajar como transportista, pues el encantaba andar de arriba a abajo con su carrito, conversando y ayudando a las personas.

LEA MÁS: Delincuentes usan dron para lanzar paquete con cocaína dentro de cárcel (Video)

“El también trabajó aproximadamente 16 años como policía penitenciario, estuvo en la cárcel de La Reforma y también en el centro penal San Agustín, aquí en Heredia”, añadió.

Nunca cambiaba una llanta

Una de las cosas que Rafael más lamenta es que su papá tomara la decisión de cambiar la llanta él solo, pues era algo que no estaba acostumbrado a hacer.

“Él no era de cambiar llantas, mas bien lo llamaba a uno y le decía: ‘Mira huevón, no ves que me estallé, venga ayúdeme a cambiar la llanta’, él nunca hacía eso, siempre me llamaba a mí o a mi hermano.

“Pero ayer (sábado) tomó la decisión de cambiarla él, bajó la cajita en donde tenía sus cositas, agarró la (llave) rana y la gata y fue en ese momento cuando el otro carro lo golpeó y me lo dejó sin vida en el suelo”, explicó el hijo.

Hasta el momento no se sabe nada del conductor que habría provocado el fatal accidente, pero Rafael dijo que aparentemente varios vecinos de ese lugar le habrían entregado videos de seguridad al OIJ para ayudar con la investigación.

Orozco sabe que nada en este mundo le devolverá a su papá, pero desea que el responsable de quitarle la vida sea castigado con todo el peso de la ley, pues nadie merece lo que le pasó a don Rafael.