La felicidad del vendedor ambulante, Maynor Alpízar Murillo está en andar por las calles de su amado Puriscal ofreciendo sus productos, sin embargo, desde hace más de tres meses no puede hacerlo.
Pía, como le dicen de cariño, tuvo que dejar de lado su única fuente de sustento por culpa de unos desalmados que el pasado viernes 1 de marzo lo rociaron con un líquido inflamable y le prendieron fuego.
Don Maynor pasó internado en el hospital San Juan de Dios hasta el martes de Semana Santa.
Doña Gretel Alpízar, hermana del vendedor, contó que Pía ya se encuentra en su casa, donde toda la familia lo está chineando a más no poder, esperando que pronto se recupere de las severas quemaduras que sufrió.
“Está en un largo proceso de recuperación, se le hicieron varios injertos de piel y ahorita lo estamos cuidando aquí en la casa. Además está siendo atendido en la clínica del dolor de Puriscal”, contó Gretel.
Deseando salir
Pía es de esas personas que no pueden estar quietas en la casa, a él le encanta caminar de un lado a otro, por eso es que esta situación lo tiene un poco triste, pues está deseando regresar a su habitual rutina.
“Él es una persona muy activa, está deseando incorporarse de nuevo a lo que hacía. Esperamos que en un par de meses pueda retomar la vida que llevaba”, añadió.
En cuanto a la característica carretita que usa Pía para vender refrescos, empanadas y repostería, doña Gretel contó que la tienen bien guardadita y que van a chanearla para cuando Maynor regrese a las calles.
Más ayuda
Alpízar contó que para ayudar a su hermano con la recuperación y sus demás gastos, están organizando un bingo para el domingo 30 de junio en el polideportivo de Puriscal, en el cual tendrán rifas con premios de ¢50 mil, ¢30 mil y ¢20 mil, y ventas de comida.
El valor del cartón es de ¢1000 y por la compra de cinco se regala uno más. Si usted está interesado en participar y ayuda a Alpízar, puede contactar a doña Gretel al 8430-4903.