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Las mañas de la leyenda del ciclismo Lance Armstrong al parecer siguen intactas, ya que este miércoles les metió un sprint a los miembros de la prensa y los dejó rezagados en su afán de “cazar” al texano para entrevistarlo de cara a su participación en la Ruta de los Conquistadores 2018.
La curiosa situación ocurrió poco antes de que el famoso rutero saliera rumbo a Jacó donde empezará a volar pedal este jueves en el inicio de la popular competencia.
Aunque los comunicadores no tuvieron suerte, varios niños de la Asociación Lucha contra el Cáncer Infantil sí tuvieron chance de compartir con el polémico deportista, ya que este miércoles estuvo treinta minutos con ellos en las instalaciones de la asociación (a un costado del Hospital de Niños), tiempo durante el cual hablaron, se tomaron fotos y hasta recibió un regalo de parte de los pequeños.
Anthony Monsalve, un niño de once de años de Jacó, en Garabito, Puntarenas, se dio el taco de regalarle una bola de fútbol al ciclista y vivir un momento que lo dejó sumamente emocionado. La experiencia fue tan enriquecedora, que su lucha contra la leucemia, enfermedad que le diagnosticaron hace siete meses, quedó de lado por unos momentos,
“La verdad me sorprendió mucho la noticia de que nos iba a visitar alguien tan famoso. Es una leyenda y estaba ansioso por verlo. Por eso le dije a mi mamá que madrugáramos para ir al hospital y saludarlo, era algo que no me quería perder", comentó el chiquitín.
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Con una gran y contagiosa sonrisa, el niño contó su experiencia con mucha emoción, aunque por la misma ilusión apenas pudo y decirle unas palabras.
"Le di unos regalos y lo vi serio. La verdad yo me comporté tímido y solo le pedí una foto, porque me ganó la emoción al verlo, pero al final se portó muy amigable”, contó Monsalve llenó de emoción al lado de su mamá, Katina Agüero.
“Uno tiene que ir para adelante, siempre positivo. Cada día me siento mejor, este es un día lleno de alegría. Cuando me inyectan mi mamá me dice que por mis venas está pasando la sangre de Cristo y sé que es lo que va a sanar”, agregó el pequeño que se considera un fiebrazo del fútbol y tiene como ídolos a Neymar y a James Rodríguez.
El niño y la madre recibieron un trato preferencia con respecto a la prensa, ya que Armstrong no aceptó preguntas y solo respondió un par de interrogantes que le hicieron los organizadores del evento, las cuales contestó brevemente y después jaló pasadas las 10:30 a. m. a pesar de se había citado una conferencia de prensa con él a las 11 a. m.
“Me siento muy contento de estar acá y animar a los niños, ser un soporte para ellos. Es genial ver estas instalaciones donde atienden a los pequeños y les ayudan a salir adelante de sus enfermedades”, expresó Armstrong a la consulta sobre el motivo de su vista al centro.
Sobre su participación en La Ruta de los Conquistadores, el texano solo comentó: “Vamos a ver cómo nos va. Es una buena carrera donde hay que aplicarse a fondo para hacerla. Solo he estado doce horas en Costa Rica, pero la gente me ha tratado bien, son buenas personas y espero disfrutar mi estadía”, finalizó.
Probablemente Lance no quería que le consultaran sobre su polémica vida después de su retiro, ya que Unión Internacional de Ciclismo (UCI) le retiró los siete títulos que había ganado en el Tour de Francia cuando se dio a conocer un escándalo de dopaje que manchó su carrera como ciclista y que motivó su suspensión de por vida de las carreras oficiales.
